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«No podéis servir a dos señores»
Leyendo el artículo de Alfa y Omega: No podéis servir a dos señores, me doy cuenta de que el yugo del dinero es algo sutil que cargamos muchos. Jesús no contrapone la soberanía de la lujuria o del poder a la suya, sino la del dinero; algo muy expresivo. La conferencia ¿Crisis económica, o crisis teológica?, de monseñor Francisco Javier Martínez, que se recoge en el artículo, da en el punto de la cuestión. Fue nuestra sumisión absoluta al dinero, al espejismo de ganancias especulativas para todos, lo que nos ha conducido a esta crisis. Estábamos embriagados por la ganancia sin límite, fruto del ascenso del precio de los pisos: particulares comprando viviendas y pidiendo préstamos que no podíamos pagar; bancos entregando dinero a espuertas ante la expectativa de una voluminosa rentabilidad; empresarios endeudándose para construir, seducidos por los previsibles beneficios; y el Estado refrendando este frenesí especulativo con generosas deducciones por compra de viviendas, pues la construcción llenaba sus arcas. Era una verdadera crisis de valores. O mejor dicho, la institución de un único valor: no había más ley, ni más Señor, que el dinero; es decir, nos encontrábamos ante una crisis teológica. Esta tiranía de Mamonna siempre está en el mundo. Ahora, aunque se han hecho algunos avances en materia de endeudamiento familiar, se recorta en inversiones médicas, educativas, en gastos sociales (que se necesitan más que nunca)…, para ahorrar. Nuevamente, el dinero es lo más importante. A diferencia de lo que la doctrina de la Iglesia católica postula, el hombre se está poniendo nuevamente al servicio de la economía y no la economía al servicio del hombre. Es compromiso nuestro ayudar, pero para eso hay que ponerse delante del Espíritu Santo y de su castísima esposa la Virgen, y pedir la gracia de que se abran nuestros corazones a la solidaridad.
Juan M. Palao Uceda
Madrid
Buenas homilías, buenos predicadores
Colegio de los Franciscanos de Onteniente: son las 12:30 h., y el padre Onésimo celebra la Misa. Sus dotes de buen predicador hacen que la Palabra de Dios llegue directa al corazón de los asistentes. Se expresa con fuerza, convicción, imaginación y viveza. Cita al Papa y a literatos para iluminar las situaciones cotidianas, a la luz del Evangelio. Como él dice, «para predicar bien, en una mano la Sagrada Escritura y, en la otra, los periódicos». Muchas veces los cristianos nos vemos ante homilías sin orden, sin lógica, sin entusiasmo, sin concreción. Así, el mensaje de Dios queda oscurecido. ¡Qué alegría cuando se oye un buen sermón! Los sacerdotes deben realizar un esfuerzo por formarse más. Su mensaje debe buscar mejorar la vida espiritual de los fieles, para que lo puedan aplicar a la vida familiar, profesional, estudiantil… La misión del predicador no es entretener, sino evangelizar, hablando de modo que le entienda todo el mundo, pero con precisión. Hace falta la humildad de los niños para saber predicar y saber escuchar. Como decía Unamuno: «Agranda la puerta, Padre,/ porque no puedo pasar;/ la hiciste para los niños,/ yo he crecido a mi pesar./ Si no me agrandas la puerta,/ achícame, por piedad,/ vuélveme a la edad bendita/ en que vivir, es soñar».
Vicente Escrivá
Onteniente (Valencia)
La Religión, ¿asignatura evaluable?
Si la asignatura de Religión no fuese evaluable, sería como dar a entender a los estudiantes que su estudio no merece la pena. Si la religión no merece la pena, su contenido tampoco. Y si la religión no merece nuestro aprecio, tampoco Dios. Y si así fuese, habría que estimar en mucho el azar, la combinación y la suerte como origen de todo. Si una persona inteligente es capaz de admitir el azar, la combinación y la suerte como causa y origen de todo, habría que examinar a fondo la bondad y capacidad de la inteligencia humana. Así que, si no se puede probar que el universo y el hombre son obra del azar, de la combinación y de la suerte, sin intervención de Ser vivo inteligente, es que Dios es una Realidad Personal, y la asignatura de Religión, por tanto, una ciencia a estudiar que merece ser tenida en cuenta mediante evaluación. Otra deducción sería un ataque a la inteligencia.
Manuel Alija
Correo electrónico
No al asesinato, sí a la acogida
Hace poco apareció la noticia de que una madre, al no querer abortar, tiró a su bebé por una conducción de un sistema de aire acondicionado. Noticias como éstas hacen pensar que el mundo está loco, o que hay un poder fáctico que quiere que las cosas sean así. La solución es sencilla y está en las casas de acogida de bebés. Con ese sistema se resuelven varios problemas: se acaba la discusión de cuándo es humano el feto; muchas madres no tendrán problemas psicológicos por el mal causado; con un seguimiento del bebé, las madres podrían recuperar a su hijo; y las parejas infértiles podrían adoptar niños sin necesidad de viajes a países lejanos y burocracias complejas.
Jorge Dorvier
Madrid
La JMJ de Río de Janeiro
En Río de Janeiro se celebra la Jornada de 2013, del 23 al 28 de este mes. Benedicto XVI, antes de su renuncia, dejó escrito el Mensaje para esta Jornada, y en él hace referencia a la imagen de Cristo Redentor que preside la ciudad, desde el cerro del Corcovado. Sus brazos abiertos son el signo de la acogida que el Señor da a cuantos acuden a Él, y su corazón representa el inmenso amor que tiene por cada uno de nosotros. «Dejaos amar por Él y seréis sus testigos que el mundo tanto necesita», decía. El lema Id y haced discípulos a todos los pueblos es la gran exhortación misionera que Cristo dijo a la Iglesia y que sigue siendo actual. Esta JMJ coincide con el Año de la fe, en cuyo comienzo el Sínodo de los Obispos trató de la Nueva Evangelización para la transmisión de la fe cristiana. Como, al iniciar su pontificado, el Papa Francisco dijo: «Nunca nos dejemos vencer por el pesimismo, no caigamos en el desánimo, tengamos la firme convicción de que, con un aliento moderno, el Espíritu Santo da a la Iglesia el valor de perseverar y también de buscar nuevos métodos de evangelización, para llevar el Evangelio hasta los confines de la tierra».