La herida de los deseos - Alfa y Omega

La herida de los deseos

José Francisco Serrano Oceja
Detalle de la portada del libro

Lo primero que hay que aclarar es que este libro del padre José Noriega, profesor en el Pontificio Instituto Juan Pablo II, en Roma, y superior general de los Discípulos de los Corazones de Jesús y de María, es una partitura más en un proyecto editorial, sinfonía pedagógica, que representa una de las aportaciones más significativas a lo que pudiera ser un proyecto de educación a la antropología cristiana, particularmente a la sexualidad en sus diversas etapas, al matrimonio y a la familia. La colección Didáskalos alberga ya una serie de trabajos en los que, con una notable capacidad para poner encima de la mesa las preocupaciones ordinarias de los fieles cristianos, y con una no menor inteligencia de la cultura en la que nos movemos, sus autores ofrecen una adecuada respuesta a las inquietudes formativas de la conciencia cristiana. Se trata, por tanto, de una oportunidad para encontrar el norte en el proyecto de vida buena, de vida lograda, de vida de gracia y en gracia.

En nuestro tiempo, la relevancia personal del cuerpo se ha hecho irrelevante. Comer y copular han quedado reducidas a funciones a las que se sobreponen una intencionalidad externa que define la bondad de esas acciones. Sólo hay un límite para esta desdichada deriva: la prevención de la salud. Incluso el hambre y el sexo se confunden, generando extrañas actitudes. Debemos preguntarnos: ¿el hambre y el sexo escoden una verdad mayor? La naturaleza en la percepción del hambre y en la percepción erótica nos enseña el bien humano que comporta el comer y el copular. La herida de estos deseos ha entrado dentro de nosotros y nos arrastra hasta el gran milagro del amor. Que nadie piense que somos estoicos. Esto significa que reconocemos el valor del deseo, del cuerpo y de la carne. Y afirmamos que «aquí estaba el arte maravilloso de Dios, capaz de plasmar en el barro húmedo un dinamismo tal. Se salva la carne, y se salva por la carne del Hijo de Dios, que ha recibido poder nuevo en la Resurrección. Desde entonces, la economía de la salvación va de carne en carne, porque en ella pasa el Espíritu. Comer y copular, ¿cómo entran en esta economía de salvación de la carne?» (p. 190).

Con singular acierto y no poca valentía, el padre Noriega se adentra por los terrenos nada fáciles del hambre y del sexo, paradoja cultural donde las haya y reclamos de universos varios. Pero de lo que habla este libro es del deseo, de la herida del deseo en el corazón del hombre, de la estrecha relación entre el deseo de comer y del deseo sexual, de la percepción de lo que se desea, del placer en la satisfacción del deseo, de la felicidad y, al final del libro, de la vida buena, de la vida lograda. He aquí una teología del placer. Y lo hace de una manera en la que la teología moral clásica, principalmente la asentada por santo Tomás de Aquino, sirve de base para un desarrollo al que se suman las aportaciones de las modernas ciencias y del pensamiento también moderno. Lo que debemos agradecer a nuestro autor es el conocimiento que manifiesta del cine y de la literatura clásica y contemporánea, y esa capacidad de articular una pedagogía cristiana del deseo en relación y diálogo con la cultura contemporánea.

No sólo de sexo… Hambre, libido y felicidad: las formas del deseo
Autor:

José Noriega

Editorial:

Monte Carmelo

Año de publicación:

2012

Páginas:

212

Portada del libro 'No sólo de sexo... Hambre, libido y felicidad: las formas del deseo'