Gentes: Martin Barta, sacerdote (en Boletín de Ayuda Iglesia Necesitada) - Alfa y Omega

Con el rosario, tenemos toda la fe católica en una sola mano. Al principio del rosario cuelga un crucifijo: con él rezamos el credo, que es toda nuestra doctrina de la fe. A continuación, le siguen las primeras tres cuentas: aquí rezamos por las tres virtudes divinas, fe, esperanza y amor, que son toda nuestra doctrina de la vida. Después le siguen las cuentas de los Misterios de la vida de Jesús, Evangelios que se pueden tocar con las manos y con el corazón. No es necesario creer y vivir más para acceder al reino de Dios.