Los cristianos piden justicia en la India
Los cristianos del Estado de Orissa, y de otros lugares de la India, salieron a la calle, durante los últimos días de agosto, para conmemorar el aniversario de la matanza de más de 50 cristianos y la destrucción de un centenar de templos en el distrito de Kandhamal, en 2008. «La paz solamente puede llegar cuando se restablezca la verdad y la justicia», afirmó durante la manifestación, en la capital de este Estado, monseñor Sarat Nayak, obispo de Berhampur. La matanza de agosto de 2008 ha sido una de las oleadas más graves de violencia anti-cristiana en Orissa, aunque los ataques han continuado después. Unos 50.000 personas tuvieron que abandonar sus hogares, de las cuales 20.000 aún permanecen en campos de refugiados. Orissa fue el primer Estado de la India en aprobar, en 1967, una ley anti-conversión, que los extremistas hindúes utilizan para acusar a los cristianos de proselitismo y justificar así sus ataques. En el Estado de Hhimachal Pradesh, en el norte del país, un grupo de entidades cristianas recurrió en 2011 una ley similar, y han logrado que el Tribunal Supremo declare inconstitucionales las restricciones a la conversión de una religión a otra. El padre Dominic D’Abrio, portavoz de la Conferencia Episcopal de la India, ha explicado que «la sentencia podría sentar un precedente».