Líderes cristianos: la ayuda israelí en Gaza puede ser «una tapadera para operaciones militares» - Alfa y Omega

Líderes cristianos: la ayuda israelí en Gaza puede ser «una tapadera para operaciones militares»

El laboratorio de ideas ecuménico Una Voz de Jerusalén por la Justicia denuncia que el reparto de alimentos «está condicionado a un desplazamiento todavía mayor de la población» hacia los puntos de distribución, situados donde quiere Israel

María Martínez López
Palestinos regresan de un reparto de alimentos de la GHF, el 8 de junio
Palestinos regresan de un reparto de alimentos de la GHF, el 8 de junio. Foto: AFP / Eyad Baba.

«SOS. Necesitamos vuestra ayuda». Es el llamamiento desesperado que ha lanzado el laboratorio de ideas Una Voz de Jerusalén por la Justicia, formado hace un par de meses por líderes de distintas confesiones cristianas. Después de un año y medio, este grupo quiere «dar la voz de alarma» sobre la «escalada sin precedentes» que se está viviendo en la guerra de Israel en Gaza. «La comunidad internacional debe intervenir. Aunque parece que los líderes mundiales no oyen nuestras voces, animamos a todos los que tengan oídos para oír y ojos para ver a pasar a la acción».

Además del aspecto más evidente del conflicto, el grupo apunta al supuesto plan de distribución de ayuda humanitaria puesto en marcha en las últimas semanas por Israel como otra forma de «escalada de la guerra». Tanto la ONU como diversas ONG comparten esta opinión sobre la Fundación Humanitaria para Gaza (GHF, por sus siglas en inglés). Así, el comunicado denuncia que el reparto de alimentos «está condicionado a un desplazamiento todavía mayor de la población» hacia los puntos de distribución, situados donde quiere Israel.

En cifras

Casi 55.000 muertos y más de 120.000 heridos desde el inicio de la guerra.

10.000 nuevos casos de desnutrición identificados por la ONU.

A esto se suman «los procesos de revisión», por los cuales se exige a quienes necesitan alimentos que permitan que se recojan sus datos biométicos. Además, hay numerosas «dificultades para llegar a los puntos de distribución» y se producen «continuos homicidios de gazatíes mientras se dirigen» a ellos. Todo ello los lleva a considerar muy probable que «la GHF sea una tapadera para operaciones militares israelíes».

Esta estrategia «presenta a los gazatíes una terrible elección: someterse a un control total por parte de Israel o morir de hambre». El texto da un paso más y subraya cómo «muchos se preguntan si esto podría llevar a otro intento de limpiar étnicamente la Franja» hasta «empujar a la población más allá de sus fronteras». No en vano «el objetivo final de sacar a la población palestina se ha formulado de forma abierta y repetida por parte de políticos israelíes, incluidos miembros del Gobierno, desde que el presidente Trump lo sugirió por primera vez el 5 de febrero».

Decenas de muertos diarios

Por otro lado, Una Voz de Jerusalén por la Justicia recuerda que desde que Tel Aviv renovó su ofensiva el 18 de marzo, «solo ese primer día cientos de personas fueron asesinadas». Desde entonces, «se mata a decenas de personas casi a diario» mientras «el Ejército israelí ocupa cada vez más territorio de la Franja», denuncia el comunicado. «Las vidas de más de dos millones de gazatíes y los 24 rehenes israelíes vivos» que siguen en cautividad «están en riesgo en cada momento».

Los firmantes de la declaración se reconocen «exhaustos» y desanimados, como muchas personas que siguen este conflicto y se ven bombardeadas por terribles imágenes. Como los apóstoles que habían vuelto a Galilea tras la muerte y resurrección de Jesús y que habían pasado la noche sin pescar nada. Pero, como Jesús, «os llamamos: por favor, intentadlo de nuevo, echad de nuevo las redes. Os suplicamos que no os rindáis. Que nos llene la energía de la Resurrección y del Espíritu Santo en Pentecostés y nos comprometamos de nuevo a luchar por la vida y la libertad para nuestros hermanos en Gaza y en todos los demás lugares de Palestina e Israel».

Entre los miembros de Una Voz de Jerusalén por la Justicia se encuentran el patriarca emérito de Jerusalén de los Latinos, Michel Sabbah; el obispo luterano emérito Munib Younan; la coordinadora del Centro Ecuménico Sabeel, Sawsan Bitar; el teólogo palestino John Munayer; el padre jesuita David Neuhaus y el padre Frans Bouwen, de los Misioneros de África.