El Papa acepta la renuncia del cardenal Cañizares - Alfa y Omega

El Papa acepta la renuncia del cardenal Cañizares

Enrique Benavent, que fue auxiliar de Valencia y actualmente es obispo de Tortosa, será su sucesor

Fran Otero
El cardenal Cañizares, este domingo en la catedral de Valencia. Foto: AVAN / V. Gutiérrez.

El Papa Francisco ha aceptado este lunes la renuncia del arzobispo de Valencia, cardenal Antonio Cañizares Llovera, que deja la archidiócesis tras ocho años al frente. Le sustituirá Enrique Benavent, que vuelve a Valencia —donde fue sacerdote y obispo auxiliar— tras su paso por Tortosa. Tomará posesión el 10 de diciembre.

El purpurado ya dejó entrever este domingo que su ministerio episcopal en Valencia llegaba a su fin en la celebración del solemne tedeum con motivo del Día de la Comunidad Valenciana. «Doy gracias a Dios por concederme este lugar hace ocho años y también hoy, casi al final de mi servicio, quiero dar gracias por este don que Dios me ha concedido que tanto estimo, admiro y agradezco de una manera particular a este cabildo de la catedral, signo y manifestación de la diócesis y de su fe inquebrantable», afirmó.

Una vez comunicada la noticia, Cañizares, que será el administrador apostólico hasta la toma de posesión del nuevo arzobispo, ha agradecido a todos su colaboración y les ha pedido ayuda para este periodo de transición. «Estos años he palpado la inmensa bondad de Dios. Nunca me ha dejado abandonado, aunque yo no haya sido siempre fiel. No me he reservado nada. Me he gastado por la Iglesia, incluso hasta la extenuación», ha afirmado.

Por su parte, Benavent ha asegurado en un mensaje dirigido a su nueva archidiócesis que ser arzobispo de Valencia es «una responsabilidad que nunca hubiera imaginado» y ha apelado a que la Iglesia «sea una auténtica familia». «Nos une la fe y el amor a Cristo y a la Iglesia que todos compartimos. Si estos son auténticos, las diferencias legítimas que pueda haber entre nosotros no se convertirán en divisiones, nuestro testimonio será creíble e iluminador para el mundo», ha añadido.

Enrique Benavent, nuevo arzobispo de Valencia. Foto: Víctor Gutiérrez.

Con todo, ha dicho que vuelve a Valencia «con alegría cristiana», «buscando siempre los intereses de Cristo y no los míos» y «no como un déspota que se considera a sí mismo dueño del rebaño, sino con el deseo de que mi ministerio haga presente a Cristo». «Me gustaría que en mis palabras resuene siempre la palabra del Evangelio y de la fe de la Iglesia. Esto es lo que quiero ofreceros», ha concluido.

Cañizares: una vida dedicada a la Iglesia

Natural de Utiel, donde nació el 15 de octubre de 1945, Cañizares tiene una larga trayectoria de servicio a la Iglesia. Primero como sacerdote y luego como obispo. La mitra le llegó en abril en 1992, cuando se convirtió en obispo de Ávila. Luego pasó por Granada y más tarde por Toledo.

Tras una pausa para encargarse, entre 2008 y 2014, de la Congregación para el Culto Divino y Disciplina de los Sacramentos en el Vaticano, el Papa Francisco lo designó arzobispo de Valencia. Fue creado cardenal por Benedicto XV en el primer consistorio de su pontificado.

En la Conferencia Episcopal Española es miembro de la Comisión Permanente y miembro del Consejo de Presidencia. También es miembro de la Comisión Episcopal para la Liturgia.

Benavent vuelve a casa

La archidiócesis seguirá teniendo al frente a un arzobispo valenciano, pues Enrique Benavente es natural de Quatretonda (Valencia). Ha desarrollado toda su vida pastoral en esta diócesis. Allí fue ordenado sacerdote por Juan Pablo II el 8 de noviembre de 1982.

En 2004 fue nombrado obispo auxiliar de Valencia, cargo que desempeñó hasta 2013, cuando fue enviado a Tortosa como obispo titular.

En la CEE es presidente de la Comisión Episcopal para la Doctrina de la Fe y miembro de la Comisión Permanente.