Monseñor Mario Iceta: «Me gustaría que salieran propuestas concretas que revitalizaran la pastoral familiar»
El obispo de Bilbao se encuentra ya en Roma para participar en la Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos, que se prolongará durante las tres próximas semanas. Juanma Jubera, director del espacio Iglesia Hoy que se emite en la emisora diocesana Radio Popular-Herri Irratia, entrevistaba a monseñor Mario Iceta. Extractamos algunas de las cuestiones a las que se ha referido el prelado en la entrevista realizada en vísperas de su partida
El Papa Francisco como cabeza del colegio episcopal, quiere someter a deliberación y a consulta temas que a él le parecen de lo más importante. Sabemos que el Papa tiene especial predilección por las cuestiones de familia, de hecho es una cuestión que ha suscitado dos sínodos, pienso que es el único tema del que se hacen dos sínodos consecutivos. Y aquí estamos un grupo de obispos de todo el mundo, representando a las iglesias locales de todas las latitudes, y también grupos de familias, de teólogos, de expertos, de pastoralistas para abordar esta cuestión que es la vocación y la misión de la familia en el día de hoy, ante los desafíos que se plantean de la familia.
Van a ser tres intensas semanas. Esta primera es situarse, organizarse, desarrollar la dinámica de trabajo. Ya se nos había advertido que cada semana se tratará una de las tres partes que tiene el instrumento de trabajo (Instrumentum Laboris). Van a ser unos días intensos de oración, de reflexión, de escucha, de propuesta, de diálogo, de discernimiento, yo pienso que es un tiempo de gracia para la Iglesia.
Los temas están muy de actualidad, están en los medios, son delicados, algunos muy sensibles, cuando hablamos de la familia.
Sí, es prioritario precisamente por esto. Creo que son temas de tal calado que hay que tratarlos con profundidad; entonces yo supongo que hoy que comienzan las tareas, habrá que priorizar. Hay temas que son para varios sínodos. Yo pienso que, los padres sinodales, y solo es mi opinión, tratarán aquellos temas que sean más urgentes, que requieren una respuesta más inmediata. Sí, me gustaría que salieran algunas propuestas operativas que revitalizaran la pastoral familiar, y que dieran respuesta a asuntos concretos que tenemos encima de la mesa.
¿Cuáles son algunos de los temas urgentes?
En primer lugar, cómo enraizar la preparación del matrimonio en la Iniciación Cristiana. Yo pienso que muchas personas que se acercan a explorar para contraer el matrimonio, te das cuenta que su iniciación cristiana necesita ser impulsada y ser fundamentada. Y esto hay que hacerlo desde el comienzo, cuando empiezan los jóvenes a tener una relación, cuando empiezan a enamorarse de otra persona, la preparación no debe dejarse el final sino al principio. Hay un camino que recorrer. Después, acompañar a las personas que se preparan al matrimonio. Cómo acompañar y cómo hacer un acompañamiento personalizado. Después, acompañar la vida de los matrimonios, sobre todo en los primeros años. Cómo esa vida tiene que estar enraizada en la propia vida de la parroquia. Un tercer tema sería precisamente esa misión de la familia. Me parece que la pastoral familiar es capaz de aunar, es donde puede converger toda una pastoral parroquial, que muchas veces puede verse muy fragmentada. Yo siempre digo que Cáritas donde tiene sus raíces es en la familia: allí es donde hemos sido educados en la gratuidad, en la donación, a entregarnos, a ser capaces de ver las necesidades de los demás. Y luego está el tema de cómo acompañar aquellas situaciones de dificultad de crisis matrimonial, de rupturas, de dolor. En ese aspecto, todo lo que sea preparar personas capaces de acompañar esta situaciones, de potenciar el trabajo de los centros de orientación familiar. Nosotros tenemos uno, Lagungo, pero cómo se hace también en los territorios como se puede crear estos lugares de acompañamiento, lugares donde puedan ser sanadas esas heridas, y muchos temas más.
Me gustaría que comentase cuál va ser su participación, que es la participación de la Diócesis en el Sínodo.
Se nos ha pedido que los padres sinodales hagamos alguna intervención, yo tengo preparada una intervención en las líneas que acabamos de comentar; también se han distribuido las homilías; a mí me toca un día predicar en una de las horas litúrgicas, y después los círculos menores, escuchar y aprender y sintetizar temas. Yo soy absolutamente novato. Es el primer sínodo al que acudo. Estoy con el arzobispo de Valladolid, monseñor Ricardo Blázquez, alojado en el mismo sitio, y él sí que ha acudido a muchos sínodos, y la participación será respetuosa, sencilla, y lo que con humildad pueda aportar un granito de arena y que ojalá la asamblea sinodal pueda dar a la Iglesia unas directrices, unas orientaciones, que la enriquezcan que sirvan para su tarea evangelizadora.