Una Iglesia viva y joven

«La verdadera libertad se demuestra actuando con responsabilidad. Proclamad la alegría de Cristo en nuestro tiempo»: en estas dos frases, y en la invitación a los nuevos movimientos eclesiales a ser escuelas de vida y de libertad, se puede condensar el mensaje que el Papa Benedicto XVI ofreció, en la plaza de San Pedro, a más de 350.000 miembros de todos los movimientos y realidades eclesiales. El Santo Padre les animó a trabajar por la unidad de la Iglesia, y volvió a subrayar que la vida se gana entregándola a los demás. Una vez más, la Iglesia ha vuelto a testimoniar que «está viva y es joven», como el propio Santo Padre señaló el mismo día del inicio de su pontificado. En las fotos, la impresionante riada de fieles que hizo pequeña la plaza de San Pedro, y la figura del Vicario de Cristo.