SOS de los jesuitas desde Nepal
Los 68 jesuitas que viven en Nepal han tenido suerte en el sentido de que no han perdido la vida ni han sufrido grandes heridas, como explica en un comunicado el P. Borniface Tigga, SJ, Superior Regional en Nepal. El apoyo en la oración y la asistencia material de nuestros compañeros jesuitas, de sus amigos, de la Iglesia y del público en general, explica P. Borniface, serán fundamentales para llevar a cabo una gran ayuda a los que están en grave y urgente necesidad, y para comenzar la reanudación de Nepal después las devastadoras consecuencias del terremoto.
«El sábado 25 de abril, pocos minutos después del mediodía, un fortísimo terremoto de 7,8 grados en la Escala Richter, sacudió Nepal. El epicentro estuvo a mitad de camino entre la ciudad de Katmandú y Pokhara, en el Nepal central», se lee en la nota del jesuita. «También se cuenta con muertos y destrucciones en Tíbet, Bangladés, India septentrional y Bután, aunque los mayores daños estuvieron en Nepal. Los 68 jesuitas del país, como también otras comunidades religiosas y el Vicariato, han sido afortunados en el sentido de que no han perdido la vida ni han sufrido grandes heridas. Sí han quedado devastados algunos edificios de nuestras instituciones», se lee en la nota. Cuando pase el peligro, explica, valorarán con más detalle la situación para que estén seguras las personas a las que prestan servicio.