Para cambiar la manera de hacer, hay que cambiar la manera de pensar. De eso habla el padre Alfonso López Quintás, uno de los grandes filósofos españoles de nuestro tiempo, que esta tarde, en la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas, presenta sus últimos libros: La ética, o es transfiguración, o no es nada (BAC) y El arte de leer creativamente (Stella Maris).
El primero nos sitúa ante la necesidad de método para abordar la vida y, paradójicamente, ante la libertad que tiene la persona de saltarse el método. ¿Queremos descubrir cómo nos desarrollamos, cómo nos abrimos a las realidades que contextualizan nuestra vida, cómo vamos cambiando y transfigurando lo que nos ocurre? López Quintas estudia los diversos modos de transfiguración que realizamos cuando vivimos una vida ascendente, y analiza el poder transfigurador del lenguaje, el juego, el arte y la literatura; la generosidad, la creatividad, la visión de largo alcance –¿la esperanza?–, el amor de alta calidad –que es el oblativo, el que se ofrece–; todo lo que nos ocurre cuando empezamos a vivir de modo éticamente valioso, cuando asumimos los grandes valores –unidad, bondad, justicia, belleza, verdad– y queremos vivirlos con plenitud. Tan convencido está de lo que nos propone, que se ha dedicado a mostrar «la grandeza a la que todavía podemos aspirar si nos atrevemos a valorar la vida de otra manera», una expresión de E. Sábato que figura en el lema de la obra. Tenemos que decidirnos a crecer, para lo cual debemos enriquecer creativamente las realidades del entorno, realizar las transfiguraciones de la conducta que nos exigen esas realidades transfiguradas.
En su otro libro, El arte de leer creativamente, vuelve a aparecer el método. Yo creía que sólo necesitaba ponerme las gafas para leer. No. Ahora tendré que ponerme este libro también. Nunca había visto un manual tan bueno para enseñar a hacer lectura comprensiva. Te toma el autor de la mano en el índice y ya no te suelta en 348 páginas. A leer te tienen que enseñar, como a todo, y conviene dejarse orientar. Como es importante saber quién eres tú al leer, quién escribe y por qué se dirige a ti, qué papel juegan tus experiencias y sus experiencias, cuál es el contexto de la obra… y recordar que aprender y jugar son parte de una misma cosa.
Comienza con una cita del Persiles, quizá la obra de la que Cervantes se sentía más orgulloso, relacionando el ver, el leer y el ingenio. Y nos va estructurando la mente con un método que nos ayudará a entender mejor Juan Salvador Gaviota, Siddharta, El túnel y Tierra de los hombres. Bach, Hesse, Sábato y Saint-Exupéry, diferentes formas para la pasión por la lectura. Talla única para una cosmovisión libre y múltiple. ¿Cómo lo consigue? Lea usted este libro. Y compártalo: ser feliz tiene que ver con hacer felices a los que nos rodean. Una buena manera de transfigurar.