«¡De la mano de María ponte en camino, levántate y no dejes de mirar adelante!» - Alfa y Omega

«¡De la mano de María ponte en camino, levántate y no dejes de mirar adelante!»

El arzobispo de Madrid y neocardenal, José Cobo, da gracias a los jóvenes por participar en la JMJ y les convoca a un encuentro el próximo 7 de octubre

Redacción

«La Iglesia que camina en Madrid te agradece de corazón este trozo de camino que hemos compartido estos días en la JMJ. Gracias al Papa Francisco que nos ha convocado y a ti, que has respondido, ha sido posible recorrer un camino profundo y hondo», así comienza la carta que el arzobispo de Madrid y neocardenal, José Cobo, dirige a los jóvenes madrileños que han participado en la JMJ de Lisboa.

Les dice que han recibido un regalo para sentirse parte de la Iglesia junto al Papa, «para vivir de verdad y para profundizar en la fe». También destaca que la experiencia que han vivido les ha permitido encontrarse con otros jóvenes y así «tocar una alegría diferente y nueva». Por eso, les aconseja que no dejen pasar todo lo vivido: «Estos días posteriores a la JMJ no dejes de acoger y dar vueltas desde el corazón a lo que Dios te ha señalado. Saca ratos para anotar, recordar, orar y pedir y agradecer lo que se ha entregado. Si puedes háblalo, compártelo con tus amigos, en tu grupo de referencia o con tus acompañantes en la fe. Eso nos ayudará a todos».

«Pronto te enviaré unas propuestas para hacerlo concretamente», anuncia Cobo. Estas propuestas servirán como material para un encuentro que tendrá lugar el 7 de octubre al que el arzobispo de Madrid convoca a los jóvenes y que servirá «para recoger lo vivido y hacerlo testimonio para todos, también para quienes no han podido venir». El arzobispo anima a los jóvenes que han participado en la JMJ a que no olviden lo vivido para dar testimonio de su experiencia a otros chicos y chicas de su edad.

José Cobo en este mensaje tampoco se olvida de dar las gracias a quienes han trabajado para hacer que esta primera JMJ después de la pandemia se hiciera realidad.

Y se despide: «Gracias por hacer posible este momento tan especial de Iglesia universal y de Iglesia diocesana. No dejes de seguir este camino en el que te has levantado. Buen verano y gracias por ser parte de esta Historia que continúa. Un abrazo de tu obispo y de tus compañeros y compañeras de camino».