Cardenal Angelo Amato: «Con la Palabra del Señor se superan todas las dificultades» - Alfa y Omega

Cardenal Angelo Amato: «Con la Palabra del Señor se superan todas las dificultades»

Tras presidir la Misa de beatificación de 522 mártires del siglo XX en España, respondiendo a preguntas de Alfa y Omega, el cardenal Amato recuerda que «las formas de persecución cambian», y que «el gran testimonio de los mártires es el de una vida tomada en serio; una vida vivida por el Evangelio, por el Evangelio de la caridad y de la verdad, que es la Palabra de Jesús»

José Antonio Méndez
El cardenal Angelo Amato.

El Papa Benedicto XVI habló de las nuevas formas de martirio. ¿Cuáles son y cómo se pueden superar, en el día a día, esos nuevos martirios?
Las formas de persecución cambian: muchas veces son persecuciones ideológicas, otras son persecuciones expresamente antievangélicas, y muchas veces son persecuciones cruentas que acaban con la muerte. Pero podemos superarlas con la fuerza del testimonio que han tenido los mártires de ayer, de hoy y de mañana: los cristianos siempre deben tener confianza y fe en la Providencia y en que, con la Palabra del Señor, de verdad, se superan todas las dificultades. La caridad y la verdad superan todas las mentiras de la persecución.

El anticlericalismo español, ¿es sólo cosa del pasado?
No sé, la verdad, porque soy de Italia y no lo conozco bien. Pero creo que si la Iglesia muestra su deseo de caridad, su deseo de bondad y de perdón, todos estaremos de acuerdo para que vivamos en medio de la concordia y la paz, y no de la división y del odio.

El testimonio de los mártires ha sido utilizado de forma política por diferentes ideologías. ¿Cómo podemos superarlo?
No sé si en España se ha superado o no, no lo conozco lo suficientemente bien. Pero, en todo caso, se supera repitiendo lo que ha dicho el Papa Francisco: predicando la caridad, predicando la civilización del amor, la civilización de la fraternidad y de la armonía. Nunca más guerra, ni división, ni odio. ¡Nunca más, nunca más! Hagamos prevalecer la caridad, el amor sobre el odio y sobre la división. Los mártires, sobre todo, nos enseñan el perdón y la conversión del corazón.

Usted habló, en su homilía, de la importancia que tiene el testimonio de los mártires para los sacerdotes y los seminaristas de hoy. ¿Qué pueden aprender de los mártires los sacerdotes y seminaristas actuales?
El mensaje de los mártires es para todos: paz, concordia y fraternidad. Nunca más odio ni división. El gran testimonio de los mártires es el de una vida tomada en serio; una vida vivida por el Evangelio, y por el Evangelio de la caridad y de la verdad, que es la Palabra de Jesús. Este ejemplo vale para los sacerdotes y para los laicos; y de todas las edades: mayores, o pequeños. Por tanto, la formación de hoy debe ser una pedagogía evangélica que consista en recordar la Palabra de Jesús, en hacerla actual y en vivirla.

¿Se refiere a la formación que se imparte en los seminarios?
¡En todos los lugares! ¡En cualquier sitio! Sí, en el seminario sí, pero también en casa, en familia, que es donde se recibe la primera formación cristiana. El primer seminario es la familia, y por eso es tan importante que las familias eduquen cristianamente a los hijos con esa pedagogía de vivir la Palabra de Jesús.