Francisco invita a las parroquias a recuperar la Liturgia de las horas para estar más unidas - Alfa y Omega

Francisco invita a las parroquias a recuperar la Liturgia de las horas para estar más unidas

Ha enviado un mensaje a la 74ª Semana Litúrgica Italiana en el que además pide que se cuide la música en las Misas y que cada fiel tenga un papel en la liturgia comunitaria

Ángeles Conde Mir

Francisco ha querido participar en la 74ª Semana Litúrgica Italiana, que se celebra en estos días, con un mensaje en el que destaca algunos aspectos de la liturgia. El texto lo firma el Secretario de Estado, Pietro Parolin.

El cardenal retoma las palabras de Romano Guardini, autor al que Francisco recurre en numerosas ocasiones, para explicar que la liturgia «introduce en la oración toda la amplitud de la verdad y no es otra cosa que el dogma rezado, la verdad revivida rezando». También cita otras palabras del Papa quien recuerda que la liturgia «pide ser celebrada con fervor, para que la gracia derramada en el rito no se desperdicie, sino que alcance la experiencia de cada uno».

Para Francisco los gestos de la asamblea como la postura corporal, estar en silencio, la voz o la implicación de cada persona son importantes durante la liturgia y necesarios para reforzar la unidad de la propia comunidad. No significa uniformidad, señala el mensaje, sino ser conscientes de la necesidad de superar cualquier individualismo.

En este texto, el Pontífice indica que hay que tener en cuenta algunos aspectos importantes relacionados con la liturgia. Uno es esta coralidad de la oración litúrgica «mediante la cual, uniéndonos a la lengua materna de la Iglesia, nos convertimos en un solo cuerpo y una sola voz». Propone poner en práctica esta coralidad mediante la Liturgia de las horas. Por ello, el Papa invita a las comunidades y parroquias a que «vuelvan a elevar a coro la oración de los salmos y aprendan a vivir, en la liturgia y en la vida, el valor de la unidad y la comunión».

Otro aspecto que destaca Francisco es la relación con la música sacra, con el canto. Porque «la música en la liturgia no es un elemento ornamental, sino parte integrante y necesaria que contribuye a los demás lenguajes de los que se compone la liturgia». Y porque, con el canto, dice el Papa, los fieles expresan su fe. Por ello, pide que se cuide especialmente la música y el canto, sobre todo, durante la Misa dominical.

Un tercer aspecto es el silencio. El Papa «nos pide contrarrestar el frenesí, el ruido y los cuchicheos que nos amenazan en la vida cotidiana, valorando el silencio sagrado, gesto elocuente, tiempo propicio y espacio fructífero para permanecer en el amor del Señor». En este silencio, asegura el Santo Padre, la Iglesia también podrá escuchar mejor al Espíritu Santo.

Por último, otra dimensión importante en la liturgia es la promoción de la ministerialidad litúrgica. Es decir, «interpretar los ministerios al servicio de la liturgia». O lo que es lo mismo, que cada uno en su ministerio participe en activamente en la asamblea para manifestar también a través de la liturgia «la índole sinodal de la Iglesia». Así, subraya el mensaje, «se evitarán personalismos y protagonismos y habrá un verdadero servicio a la comunión».