Santiago Sánchez Cogedor ya está en España tras un año de cárcel en Irán - Alfa y Omega

Santiago Sánchez Cogedor ya está en España tras un año de cárcel en Irán

El aventurero fue encarcelado en octubre de 2022 por fotografiar la tumba de Mahsa Amini, la mujer que fue asesinada por llevar mal colocado el velo

Redacción
Santiago Sánchez Cogedor caminando a Irán desde Irak antes de su detención
Santiago Sánchez Cogedor caminando a Irán desde Irak antes de su detención. Foto: Santiago Sánchez Cogedor.

Santiago Sánchez Cogedor ha vuelto a España después de 15 meses en una cárcel de Irán. El aventurero fue encarcelado en octubre de 2022 por fotografiar la tumba de Mahsa Amini, la joven de 22 años que fue arrestada y torturada por llevar mal colocado el velo. Su muerte, ocurrida como resultado del maltrato, desencadenó una ola de protestas en el país cuya represión provocó más de 500 muertes.

Sánchez Cogedor aterrizó el lunes 1 de enero en el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas tras un vuelo desde Dubái. El 31 de diciembre, día en que fue excarcelado, la embajada de Irán en España lanzó un comunicado a través de la red social X donde sostenía que «su liberación se realiza en el marco de relaciones amistosas e históricas entre los dos países y en cumplimiento de las leyes». Era el único español preso en el país.

En declaraciones a la agencia EFE, Celia Cogedor, madre del madrileño de 41 años, se ha mostrado «abrumada» por la noticia. «Se ha acabado la pesadilla», ha celebrado. También ha dado las gracias al Gobierno, al Ministerio de Exteriores y a Ángel Losada, embajador de España en Irán: «Si no llegar a ser por él, mi hijo habría tardado años en salir de la cárcel». La madre ha confesado que su hijo «está muy delgado, ha envejecido, pero el sufrimiento lo va a utilizar para ayudar a los demás». Y le ha preparado para los próximos días su comida favorita, «verdura y pescado».

Sánchez Cogedor fue detenido en octubre de 2022 cuando viajaba a pie hacia Catar para ver el Mundial de Fútbol que se celebró en ese país. Durante una de sus paradas, en este caso en la ciudad iraní de Saqqez, visitó y fotografió la tumba de Mahsa Amini. «Entonces tres hombres le taparon los ojos, le metieron en un coche y le llevaron a la cárcel», ha recordado su madre, ya aliviada por la vuelta de su hijo.