Roma no tira la toalla con los lefebvrianos - Alfa y Omega

Roma no tira la toalla con los lefebvrianos

Redacción

La Santa Sede entregó, el 16 de marzo, una carta a monseñor Bernard Fellay, superior general de la Fraternidad Sacerdotal San Pío X (lefebvrianos), en la que se le conmina a superar «los problemas doctrinales que subyacen a la fractura con la Santa Sede». En un comunicado difundido el viernes por la Santa Sede, se explica que «no es suficiente» la posición expresada por los lefebvrianos a la nota preliminar que la Santa Sede presentó «como base fundamental para el logro de la reconciliación plena», y que incluía «principios doctrinales y criterios de interpretación de la doctrina católica», incluyendo las enseñanzas del Concilio Vaticano II. En particular, los lefebvrianos —grupo compuesto por unos 200 mil fieles en todo el mundo, cuatro obispos y unos 500 sacerdotes— manifiestan sus discrepancias en temas como la libertad religiosa y el diálogo ecuménico e interreligioso. Para «evitar una ruptura eclesial de consecuencias dolorosas e incalculables» —añade el comunicado—, se invita al superior general de la Fraternidad a aclarar su posición. El nuevo plazo —explicó después el dDirector de la Oficina de Prensa, el padre Lombardi— es de un mes.