Oswaldo Azuaje, el obispo venezolano que cruzó la frontera con Colombia junto a sus feligreses - Alfa y Omega

Oswaldo Azuaje, el obispo venezolano que cruzó la frontera con Colombia junto a sus feligreses

El obispo de Trujillo acompañó de forma personal a los miles de venezolanos que a diario salen del país a través del puente internacional Simón Bolivar. El Papa «nos pidió que nos mantuviéramos fuertes y muy cercanos al pueblo», ha dicho el obispo de Trujillo en TRECE

José Calderero de Aldecoa
Foto: TRECE

Monseñor Oswaldo Azuaje es obispo de Trujillo, en Venezuela. Acaba de regresar de Roma, donde ha participado en la visita ad limina de los obispos venezolanos al Papa Francisco. El Santo Padre «nos dijo que se sentía muy cercano a los obispos venezolanos, que conocía nuestra realidad» tanto eclesial como nacional, así como «los problemas que atraviesa Venezuela».

Asimismo, el Pontífice «nos agradeció la cercanía al pueblo y la unidad entre nosotros», y «nos pidió que nos mantuviéramos fuertes y muy cercanos al pueblo», ha reconocido el prelado este miércoles en el programa Perseguidos pero no olvidados de Ayuda a la Iglesia Necesitada, en TRECE.

Cruzando el puente

Azuaje ha puesto en práctica, literalmente, esta petición del Santo Padre y ha acompañado de forma personal a los miles de venezolanos que a diario cruzan el puente internacional Simón Bolivar desde Venezuela a Colombia. «Yo me metí entre esa gente como una más, para pasar a [la diócesis colombiana de] Cúcuta. Es impresionante la cantidad de gente que por miles huyen cada día, o salen del país».

Ante esta realidad, el obispo de Trujillo ha ensalzado la labor de monseñor Ochoa, obispo de Cúcuta, que «está haciendo un trabajo impresionante y en consonancia y cooperación con la diócesis venezolana de San Cristóbal». A diario «alimentan a entre 5.000 y 8.000 personas por la mañana, a mediodía y por la noche» con la ayuda de la diócesis de Trujillo.

Labor de los sacerdotes

En lo que se refiere a Venezuela, monseñor Azuaje ha reivindicado las «ollas solidarias ante los problemas de desnutrición que sufren los niños y también los ancianos». «En Cáritas nos han ayudado a organizar mejor la distribución de alimentos y seleccionar mejor el tipo de comida que debemos entregar».

Por otro lado, también ha destacado la labor de los sacerdotes y ha pedido para ellos ayuda «para que puedan tener un sustento digno para poder servir mejor al pueblo de Dios y responderle con más fuerza al Señor».

Durante la entrevista, el obispo ha querido recordar también la invitación del Papa Francisco a la resistencia. Esto «no tiene nada que ver con un lenguaje político, ni populista, ni militarista, sino con mantenernos firmes en la fe, en la esperanza y en el amor, sin echarnos para atrás, dando testimonio y resistiendo los embates de cualquier forma que tome el enemigo», ha concluido.