Ortega hace oídos sordos al Papa y cierra otra emisora católica en Nicaragua

El régimen de Daniel Ortega ha cerrado una nueva emisora católica. Se trata de Radio Stereo Fe, que pertenece a la diócesis de Estelí, cuyo administrador apostólico es precisamente Rolando Álvarez, el obispo que fue secuestrado recientemente y puesto en arresto domiciliario por las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado.

El Instituto Nicaragüense de Telecomunicaciones y Correos ha enviado una carta a la emisora ordenándole el «cese inmediato de sus transmisiones» bajo el pretexto de que la licencia se le concedió al director Francisco Valdivia, en cual falleció el 18 de agosto de 2021. En un comunicado, Radio Stereo Fe ha calificado la orden de cierre como «injustificable», ya que la emisora ha tenido varios directores después de Francisco Valdivia y nunca hubo «ningún problema».

Por ello, «condenamos el cierre de nuestra radio, donde mucha gente humilde de nuestras comunidades se alimentaban de la Palabra de Dios; a través de la Eucaristía, prédicas y mucho más». Ahora solo podrán hacerlo a través de las redes sociales, donde el medio tiene previsto continuar con sus emisiones.

Represalias al comunicado del clero

La verdadera razón del cierre de la emisora parece encontrarse en la difusión que la radio había hecho un día antes del duro comunicado del clero de la diócesis de Estelí en el que se criticaba la detención de Rolando Álvarez y se acusaba al Gobierno de Nicaragua de incitación al odio y a la violencia contra los obispos y los sacerdotes.

El cierre de la emisora, que se suma a un sinfín de acciones de persecución contra la Iglesia —envío a prisión de sacerdotes, expulsión de órdenes religiosas del país, cierre de medios de comunicación vinculados a los católicos…—, se ha producido pocos días después de que el Papa Francisco se pronunciara sobre lo que está ocurriendo en el país.

«Sigo de cerca, con preocupación y dolor, la situación que se ha creado en Nicaragua y que implica a personas e instituciones. Quiero expresar mi convicción y mi deseo de que, por medio de un diálogo abierto y sincero, se puedan encontrar las bases para una convivencia respetuosa y pacífica. Pidamos al Señor, por intercesión de la Purísima, que inspire en el corazón de todos tal concreta voluntad», dijo el Pontífice este domingo tras el rezo del ángelus.