Madrid contará por primera vez con un albergue estable para la acogida de peregrinos
Se ha abierto en el convento de las Comendadoras de Santiago, que «llevaban siglos desvinculadas del mundo jacobeo», asegura Miguel Pérez, presidente del Camino Francés Federación, que define la apertura del albergue como un hito histórico
La capital cuenta desde este jueves con un nuevo albergue para los peregrinos del Camino de Santiago. Su inauguración, en la que estuvieron presentes el alcalde, José Luis Martínez-Almeida, el nuncio apostólico, Bernardito Auza, y el cardenal y arzobispo emérito de Madrid, Carlos Osoro, supone un hito histórico. Por primera vez, la ciudad de Madrid contará con un albergue estable en su trama urbana destinado específicamente a la acogida de peregrinos.
«Hasta ahora nadie se había percatado de que Madrid, en realidad, es la puerta de entrada y salida de todos esos cientos de miles de peregrinos internacional que llegan a nuestro país para recorrer la ruta jacobea», subraya Miguel Pérez Cabezas, presidente del Camino Francés Federación. «Lo que ocurría es que muchas veces era más fácil llegar desde cualquier país a España que desde Madrid hasta el punto en que cada peregrino fuera a iniciar la ruta».
De esta forma, el nuevo espacio, que cuenta también con un Centro Internacional del Peregrino, se presenta como un lugar de acogida, pero también de orientación espiritual, cultural y práctica para quienes se preparan para emprender la peregrinación. La parte religiosa será asumida por las Comendadoras de Santiago, en cuyo convento se ha instalado el proyecto. La parte más práctica, informativa y de acogida será implementada por distintas asociaciones internacionales.
Precisamente en la inauguración del proyecto, además de las autoridades, se encontraba la superiora del convento, el presidente de la Asociación de Amigos del Camino de Santiago de Astorga —entidad impulsora de la iniciativa junto con el resto de asociaciones del Camino Francés Federación— y sus homólogos de Estados Unidos, Corea, Canadá, Dinamarca, Reino Unido o Francia. Asimismo, estuvo presente Alfonso Zulueta, comendador mayor de Castilla de la Orden de Santiago.
Tras el acto, los primeros peregrinos pudieron hacer noche en el lugar. Allí pernoctaron representantes de distintas asociaciones de amigos del Camino de Santiago, que quisieron inaugurar simbólicamente el espacio con su presencia y hospitalidad compartida», señala Pérez Cabezas, que alude por último a las religiosas Comendadoras de Santiago. «Para nosotros ha sido una satisfacción tremenda ayudarlas a recuperar el sentido con el que fueron fundadas después de llevar siglos desvinculadas de esta actividad y del mundo jacobeo». Y añade: «Estaban absolutamente emocionadas, en especial sor Rosario, la superiora, que ha posibilitado que todo esto saliera adelante».