Los jóvenes cristianos empuñarán la espada de san Miguel para forjar una nueva generación europea
La fecha clave de la iniciativa será el 1 de agosto cuando van a lanzar un manifiesto: «Queremos que sea la declaración juvenil más respaldada de la historia de Europa, y solo así, las palabras que pronunciaremos tendrán el peso de una multitud que cree, sueña y camina unida»
La Iglesia «quiere abrir un camino de fe y esperanza» para la constitución de «una nueva generación europea». Para ello, jóvenes cristianos de todo el continente han lanzado una «iniciativa inédita» que responde al nombre de Roma 25 – Santiago 27 – Jerusalén 33.
«No se trata solo de caminar, sino de reencontrarnos con Dios y con nuestra identidad cristiana, recorriendo los caminos de Europa con una mirada nueva, valiente y alegre». En una época de distracción, desarraigo y heridas silenciosas, los jóvenes alzan la voz para decir que otra Europa es posible: una Europa con alma, han subrayado desde la Conferencia Episcopal Española.
La senda hasta el florecimiento de esa nueva generación europea comenzará este mismo mes de junio, con distintas peregrinaciones que ya están fijadas a nivel local. Sin embargo, la gran cita tendrá lugar el 1 de agosto con la proclamación de un manifiesto de los jóvenes cristianos de Europa en la basílica de Santa María in Trastevere (Roma). «Ese día, diremos juntos al mundo lo que creemos, lo que soñamos y lo que estamos dispuestos a vivir. Cada paso que damos es por quienes ya no creen tener esperanza. Esta revolución del espíritu quiere hacer visible lo invisible y dar voz a quienes buscan sin saberlo a Dios», han explicado los impulsores.
La declaración va a ser publicada en formato digital en el mes de julio para que se pueda difundir y que así jóvenes de todo el mundo puedan leerla y firmarla. «Queremos que sea la declaración juvenil más respaldada de la historia de Europa, y solo así, las palabras que pronunciaremos el 1 de agosto tendrán el peso de una multitud que cree, sueña y camina unida».
Y más allá del 1 de agosto, los jóvenes miran al Jubileo de la Redención, que tendrá lugar en 2033, y se apoyan en tres pilares:
Peregrinación
Caminamos para descubrir que seguir a Cristo es hermoso, desafiante y transformador. Redescubrimos los santuarios, el arte y el patrimonio cristiano como lugares vivos donde Dios sale al encuentro.
Evangelización
Queremos anunciar con coherencia y creatividad el Evangelio, abriendo espacios de acogida y sentido en medio de una Europa que ha olvidado su raíz.
Sanación
Muchos caminamos heridos. Esta peregrinación es también un camino de sanación, donde Cristo ofrece redención, misericordia y una nueva oportunidad.
El proyecto se articula también en torno a una gran red de caminos cristianos, entre ellos el histórico eje micaélico, que une santuarios de san Miguel Arcángel desde Irlanda hasta Jerusalén. Esta «espada espiritual» simboliza una Europa que vuelve a orientarse hacia lo alto. Monasterios, catedrales y parroquias se convertirán en puntos de luz, acogiendo a quienes caminan buscando sentido.