Las asociaciones de laicos pueden reavivar la parroquia - Alfa y Omega

Las asociaciones de laicos pueden reavivar la parroquia

Acción Católica General forma «equipos evangelizadores» para, a través de los retiros de cuatro40, reconectar a los alejados con sus iglesias

Rodrigo Moreno Quicios
Fieles de Madrid viven un primer encuentro Cuatro40 para repetirlo
Fieles de Madrid viven un primer encuentro Cuatro40 para repetirlo. Foto: Acción Católica General.

Javier Ramos es uno de los impulsores de cuatro40, «la propuesta de primer anuncio que desde hace cuatro años Acción Católica General hace a las parroquias» y que demuestra que las asociaciones laicales tienen mucho que aportar a la vida diocesana. Según explica a Alfa y Omega, este proyecto va más allá de una mera «experiencia» y busca «entrar en una clave de conversión pastoral que ayude adaptar las parroquias a los tiempos que estamos viviendo».

Consiste en la organización de un potente retiro y siete encuentros posteriores para «que la gente se pueda encontrar con Jesucristo y llegar a una inserción parroquial». Aunque el programa sigue las directrices pensadas por Acción Católica General, depende de cada iglesia particular su implementación y seguimiento.

Parroquia por parroquia, Acción Católica General ayuda a un «pequeño grupo de seis o siete personas a ponerlo en marcha». Organiza una primera experiencia para ellos, de forma que más tarde actúen como correa de transmisión. Normalmente, son «el sacerdote y unos pocos laicos» que se convertirán en un «equipo evangelizador». Son perfiles que, según recomienda Javier Ramos, ya deben «estar comprometidos y realizar algunas tareas en la catequesis, el coro, la liturgia o Cáritas, pero que necesitan revivir ese amor de Jesucristo».

Para lograr tal metamorfosis, tienen «un primer encuentro en una casa de espiritualidad o de ejercicios». Después, tras vivir la experiencia en sus propias carnes, «van necesitando menos ayuda porque la parroquia va siendo más autónoma» y realiza el proyecto por su cuenta para el resto de feligreses. Finalmente, surge el efecto dominó pues, según las previsiones de Ramos, tras experimentar cuatro40 «la gente va a querer vivir su fe en un equipo» reuniéndose y profundizando en los «itinerarios formativos» que Acción Católica General les ofrece, «basados en el magisterio de la Iglesia y en la Palabra de Dios».

Ramos señala que cuatro40 «está dirigido a mayores de 18 años de todas las edades»; aunque destinatarios ideales son esas «personas más jóvenes que, después de confirmarse, ya no aparecen por la parroquia». O «esos padres que llevan a los chiquillos a catequesis pero no están comprometidos con nada más». Según revela, «tenemos experiencias de gente alejada que ha hecho estos encuentros con conversiones muy potentes».

Es un proyecto que —siguiendo con las recomendaciones de la Conferencia Episcopal Española para el Día de la Acción Católica y del Apostolado Seglar que se celebró el pasado domingo— busca poner el anuncio de Jesucristo «en el centro de la vida de la Iglesia» para superar «el peligro de convertirse en autorreferencial». «No es una cosa que se haya sacado Acción Católica General de la manga, sino una apuesta de los obispos», matiza Ramos. Revela que estas formaciones ya se han ofrecido a las parroquias de Santa Teresa, de Tres Cantos; San Ireneo, Nuestra Señora de Moratalaz, la Natividad de Nuestra Señora o Nuestra Señora de las Rosas. «El cardenal Cobo está muy dispuesto a iniciarlas».