La cruz de la primera Misa en Brasil comienza su peregrinación por el país
El cardenal arzobispo de São Paulo, Odilo Scherer, calificó este periplo de «histórico», aunque reconoció que en la historia «ha habido muchas instrumentalizaciones» de la cruz
La cruz original que presidió la primera Misa celebrada en Brasil, hace 525 años, comenzó el pasado martes una larga peregrinación por una veintena de ciudades del país suramericano. Acababa de llegar desde Portugal, donde se custodia en el Tesoro-Museo de la Catedral de Braga. La primera parada de la reliquia fue la catedral metropolitana de São Paulo, donde el arzobispo y cardenal Odilo Scherer ofició una Eucaristía en su honor.
«Este es un momento histórico, pero también es un momento significativo para nuestra fe», afirmó el cardenal Scherer. «La cruz de Cristo está siempre presente, en nuestras iglesias, en nuestras celebraciones, pero también en nuestras casas, y muchos también la llevan como signo de pertenencia a Jesucristo», agregó.
Sin embargo, el arzobispo reconoció que la cruz también se ha utilizado de forma incorrecta. «A lo largo de la historia ha habido muchas instrumentalizaciones». Pero «no es culpa de la cruz de Cristo, no es culpa de Cristo, es culpa de quien lo hizo». Por ello, invitó a «pedir perdón», también «porque muchas veces no fuimos testigos del amor misericordioso de Dios».
Desde el templo, la histórica cruz partió en procesión hacia el Pátio do Colégio, considerado el lugar fundacional de la capital paulista, ya que fue en ese punto donde se levantó la primera construcción de la ciudad: un centro para evangelizar a indígenas. Los actos de veneración continuaron con paradas en las sedes de la Federación de las Industrias del Estado de São Paulo (Fiesp), la mayor patronal del país, y la Asamblea Legislativa regional.
Al final del día, el gobernador de São Paulo, Tarcísio de Freitas, recibió la cruz en una ceremonia institucional en el Palacio dos Bandeirantes, sede de la administración paulista. De ahí partió al Santuario de Nuestra Señora Aparecida, en el interior de São Paulo y punto central de la fe católica brasileña.
El periplo continuará hasta finales de abril por los estados de Rio Grande do Sul, Río de Janeiro, Pará, Brasilia y Bahía, informa EFE. Está programado para coincidir con las festividades de la Semana Santa, según Raposo.
El viaje finalizará en la playa de la Coroa Vermelha, en el municipio de Santa Cruz Cabrália. Fue allí donde Pedro Álvares Cabral desembarcó con su flota el 22 de abril del 1500, marcando la llegada oficial de los portugueses. Cuatro días después, en ese mismo punto, tuvo lugar la primera Misa en territorio brasileño, presidida por esa cruz.
Con 182 millones de fieles, Brasil es el país con más católicos del mundo según las últimas estadísticas de la Iglesia. Sin embargo, en los últimos años ha visto cómo la Iglesia pierde terreno frente a las nuevas corrientes evangélicas.