Gentes: Nuria Chinchilla, profesora del IESE (en Valores y ecología humana)
Navidad, tiempo de esperanza y alegría. Para ayudar a esta preparación, decoramos casas, preparamos regalos… Pero no hay que perder de vista que lo más importante es preparar nuestro corazón para que Jesús vuelva a nacer en él, además de pasar tiempo con nuestra familia. No nos dejemos llevar por un consumismo y un despilfarro sin sentido, vayamos a lo importante. El regalo más barato y efectivo es el cariño y la atención a todos los miembros de la familia, empezando por los más pequeños de la casa.
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