Gentes: Juan Antonio Gómez Trinidad, catedrático de Filosofía (en Mundo Cristiano) - Alfa y Omega

Las leyes educativas vigentes desde hace veinte años han convertido el aprendizaje en un juego, rehuyendo todo esfuerzo. De algún modo, el lema es: Yo te apruebo, y que te suspenda la vida. Para salir de esta situación, se requieren reformas escolares, pero, sobre todo y ante todo, que los padres ejerzan sus derechos y deberes como primeros y principales responsables de la educación de sus hijos.