Francisco: «Menos armas y más comida»

El Papa ha participado este jueves en un encuentro por la paz y el diálogo entre las religiones organizado por la Comunidad de Sant’Egidio en el Coliseo de Roma, en el que ha intervenido también la canciller alemana, Angela Merkel, en el que es uno de sus últimos actos internacionales antes de dejar la presidencia del Gobierno alemán.

En sus palabras ante representantes de diferentes religiones, Francisco ha calificado el comercio de armas como «una pesadilla para la humanidad», y ha dicho que el dinero que se emplea en su fabricación debería desviarse para paliar el hambre en el mundo y distribuir vacunas.

«Menos armas y más comida, menos hipocresía y más transparencia, más vacunas distribuidas de manera justa y menos armas comercializadas indiscriminadamente», ha afirmado el Papa.

Francisco ha criticado asimismo el «floreciente comercio de armas, que a menudo se mueve en las sombras, alimentado por corrientes subterráneas de dinero», lo que al final acaba provocando «guerras que juegan con vidas humanas».

En línea con otros pronunciamientos anteriores en los que también ha pedido gestos concretos encaminados al desarme, el Papa ha exhortado a las naciones a que «sin ambigüedades aparten las armas y reduzcan los gastos militares», de modo que «los instrumentos de muerte se conviertan en instrumentos de vida».

«Hoy somos espectadores de la violencia y de la guerra, de hermanos matando hermanos, como un juego que miramos desde una distancia segura, indiferentes, seguros de que nunca nos afectarán. El sufrimiento de los demás apenas nos preocupa», lamentó Francisco.

Por su parte, la canciller Angela Merkel –que realizó una visita privada al Papa por la mañana– hizo asimismo un llamamiento urgente a la paz, pues «sin respeto por aquellos que piensan de manera diferente y que creen de manera diferente, no podemos vivir en paz unos con otros», aseveró.