En el Día de Europa la Iglesia pide «todos los esfuerzos» para «una paz justa» en Ucrania
«La necesidad de unidad y paz» que hace 73 años puso los cimientos de la UE es «si cabe más urgente y apremiante» ahora, asegura el presidente de COMECE
En el Día de Europa, los obispos de la Unión Europea han pedido «insistentemente», una vez más, que se realicen «todos los esfuerzos» necesarios para superar el conflicto en Ucrania «con el fin de lograr una paz justa». Se trata de «premisas indispensables para hacer posible el crecimiento de todos dentro de la Unión Europea y más allá de sus fronteras», asegura Mariano Crociata, presidente de la Comisión de Conferencias Episcopales de la Unión Europea (COMECE) en su declaración con motivo de este día.
En el texto, Crociata lamenta que este año «el Día de Europa vuelve a celebrarse en un contexto trágico de guerra en suelo europeo, con un sufrimiento físico, material y espiritual horrible para la población de Ucrania». Por otro lado, desde que comenzó la guerra a gran escala en febrero de 2022, «las consecuencias económicas de la guerra contribuyen a agravar las condiciones sociales de la población con efectos aún más devastadores para los sectores más débiles».
Todo ello hace que «la necesidad de unidad y paz» se haya vuelto «si cabe más urgente y apremiante» 73 años después de la Declaración Schuman. Crociata alude al discurso de Robert Schuman, ministro de Asuntos Exteriores francés, con el que el 9 de mayo de 1950 propuso una administración conjunta del carbón y el acero como forma de unir a Europa y así contribuir a la paz mundial. Fue el primer ladrillo de la Unión Europea, y por ello en 1985 el Consejo Europeo eligió esta fecha como Día de Europa.
El presidente de COMECE recuerda que no hace mucho, el 23 de marzo, el Papa Francisco recordó precisamente estas palabras en su discurso ante la Asamblea Plenaria de la entidad. «Las circunstancias que dieron origen a la Unión, tras una guerra mundial que había producido inmensas destrucciones y un sinfín de muertes», prosigue su declaración, «aparecen de inquietante actualidad y nos invitan a recuperar la razón y la voluntad para perseguir con renovada determinación la unidad de Europa y la paz».
COMECE quiere ser intérprete de este compromiso, asegura. «Pretende contribuir a ello con la formación de conciencias informadas y responsables para el momento que vivimos». Los obispos que la componen «se sienten en el deber de alentar y colaborar con todos los esfuerzos que se realicen para buscar la unidad promoviendo los múltiples intereses ideales y materiales que unen a los pueblos que integran la Unión».