Hermandad del Cachorro: «Le transmitimos al Papa la implicación de las dos cofradías» - Alfa y Omega

Hermandad del Cachorro: «Le transmitimos al Papa la implicación de las dos cofradías»

Los promotores de la gran procesión que se celebrará durante el Jubileo de las Cofradías se encuentran con Francisco. «Estamos ilusionados con la respuesta de Roma», explica José Luis Aldea, hermano mayor del Cachorro

Juan Luis Vázquez Díaz-Mayordomo
Un momento del encuentro con el Papa
Un momento del encuentro con el Papa. Foto: Archidiócesis de Sevilla.

El Papa Francisco recibió el pasado miércoles en audiencia privada a los organizadores y patrocinadores de la Gran Procesión de Roma, que tendrá lugar el próximo 17 de mayo con motivo del Jubileo de las Cofradías, y en la que participarán el Cristo de la Expiración, popularmente llamado Cachorro, de Sevilla, y la Virgen de la Esperanza, de Málaga.

«Fue una conversación en la que le transmitimos el orgullo y la implicación de las dos cofradías, así como de todas las instituciones públicas y privadas que hacen posible que esta iniciativa se lleve a cabo», explica a Alfa y Omega José Luis Aldea, hermano mayor del Cachorro. De momento, «estamos ilusionados con la respuesta de Roma y con la gran cantidad de peregrinos que podrán contemplar la manera de sentir la fe que tenemos en España», añade.

En cuanto a los preparativos, «hace varios meses formamos una comisión organizadora que está planificando el viaje junto con empresas de transportes especializadas, una labor logística impresionante». Así, las dos imágenes harán el viaje por carretera en un camión especializado, con control de temperatura, sensores antivibraciones y fuertes medidas de seguridad, mientras que el paso y el resto de los enseres viajarán en barco.

Una vez en Roma, las imágenes estarán en el Vaticano recibiendo culto durante unos días antes de iniciar la procesión, desde el Coliseo hasta el Circo Máximo. La hermandad procesionará «tal como lo hacemos en Sevilla», explica Aldea. Eso sí, «no iremos de nazarenos, porque es un hábito de penitencia de Semana Santa», pero esperan que todo el pueblo de Roma y los numerosos peregrinos que estarán en la ciudad por el Jubileo asistan a este «hito histórico que jamás hubiéramos imaginado, algo sin precedentes y que representará un antes y un después».