«Tenemos que defender la religiosidad popular de quienes quieren secularizarla» - Alfa y Omega

«Tenemos que defender la religiosidad popular de quienes quieren secularizarla»

El jesuita Daniel Cuesta destaca la capacidad que tienen las devociones populares de frenar la secularización en España, en su libro Luces y sombras de la religiosidad popular

Juan Luis Vázquez Díaz-Mayordomo
Foto: Valerio Merino

«La religiosidad popular no son solo las procesiones ni la Semana Santa, sino mucho más. Es difícil de definir, porque comprende también la imagen de la Virgen que tiene una persona en casa, o la estampa en la mesilla de noche de un hospital, hasta cualquier romería. Es un fenómeno colectivo y también individual, que abarca muchísimo», afirma Daniel Cuesta, autor del libro Luces y sombras de la religiosidad popular, que se presenta este domingo en Roma.

Cuesta, jesuita y cofrade también de la Feligresía de San Andrés, de Segovia, ya ahondó en su anterior libro La procesión va por dentro en el valor de la Semana Santa como expresión artística y espiritual. Ahora ofrece un estudio de la religiosidad popular desde una perspectiva pastoral, basada en el magisterio de los últimos Papas y del Concilio, «para mostrar sus oportunidades de una manera realista».

En esta perspectiva, señala que las devociones populares «suponen de alguna manera un freno a la secularización que vivimos en España. Podrá ser un modo más o menos perfecto, pero la realidad es que hay mucha gente que se encuentra con Dios y con la Iglesia a través de ella», afirma.

En este sentido, es «un puente entre la fe y la cultura que detiene ese proceso de secularización que tiende a contaminarlo todo y a relegar la fe a un plano íntimo exclusivamente». En este contexto, la religiosidad popular «sitúa la fe en la plaza pública y muchos viven en este escenario su fe, eso es innegable».

Para el autor, este fenómeno «nos desconcierta como Iglesia porque es muy potente y muy rico», pero tiene claro que con él «Dios nos quiere decir algo y nosotros tenemos que saber cómo acompañarlo y vivirlo».

A la hora de mencionar sus sombras lamenta «que muchos se fijan más en lo negativo que en lo positivo, aunque es indudable que existen ciertos riesgos. Entre ellos, el principal es lo que Pablo VI llamaba “formas culturales sin adhesión a la fe”, pero hay más». Así, cita también la superficialidad, el individualismo o el afán de protagonismo, «pero el más mordiente es el proceso de secularización que quiere secar nuestra cultura religiosa».

Cuesta pone como ejemplo a muchos museos en los que las pinturas se exponen como una obra artística más, y donde «se le roba el alma religiosa a muchas piezas». Del mismo modo, en la religiosidad popular «hay un proceso que busca presentarla como algo meramente antropológico, turístico y social».

Para este jesuita, la Iglesia debe defender su esencia «porque muchos viven a Dios desde ahí». Por eso, «no podemos menospreciarla ni tratarla como un fenómeno simplemente cultural. Tenemos que defenderla de quienes quieren secularizarla, y cuidarla desde dentro para no jugar con la fe de muchas personas».

El libro será presentado este domingo –a puerta cerrada, debido a las restricciones por la pandemia– en la Iglesia Nacional Española de Santiago y Montserrat en Roma. La presentación consistirá en un coloquio entre el cardenal Carlos Amigo, autor del prólogo, y el autor, moderado por el rector de la Iglesia, José Jaime Brosel.

Luces y sombras de la religiosidad popular
Autor:

Daniel Cuesta Gómez, SJ

Editorial:

Mensajero

Año de publicación:

2021

Páginas:

180

Precio:

11,40 €