El Papa pide que la trata de seres humanos se considere «un crimen de lesa humanidad»
«La trata de seres humanos es una de las manifestaciones más dramáticas de esta mercantilización», ha señalado el Pontífice
El Papa ha pedido que la trata de seres humanos sea considerada «un crimen de lesa humanidad», porque «constituye una violación injustificable de la libertad y la dignidad de las víctimas, dimensiones constitutivas del ser humano deseado y creado por Dios».
«La trata de seres humanos es una de las manifestaciones más dramáticas de esta mercantilización», ha señalado el Pontífice.
Francisco se ha reunido con activistas, religiosos, fieles laicos coordinadores de proyectos y expertos procedentes de diferentes partes del mundo que se ocupan desde diferentes ámbitos de luchar contra la trata de personas y atender a las víctimas de esta plaga.
En el marco de una conferencia internacional organizada por la sección de migrantes y refugiados del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral, el Papa ha lamentado que «el mundo actual se caracteriza tristemente por situaciones que dificultan» la erradicación de la trata.
«La trata, en efecto, desfigura la humanidad de la víctima, ofendiendo su libertad y su dignidad. Pero, al mismo tiempo, deshumaniza a quienes la llevan a cabo, negándoles el acceso a la vida en abundancia. La trata, en fin, daña gravemente a la humanidad en su conjunto, destrozando a la familia humana y al Cuerpo de Cristo», ha dicho el Papa argentino.
Además, ha subrayado que «la misma gravedad, por analogía, debe ser imputada a todos los atropellos de la libertad y dignidad de cada ser humano, sea un nacional o un extranjero». De este modo, ha constatado que el tráfico de personas, en sus múltiples formas, es una herida «en el cuerpo de la humanidad contemporánea». Finalmente, ha enfatizado que «queda mucho por hacer» ante un fenómeno «tan complejo como oscuro» y ha invitado a continuar con la coordinación de «diversas iniciativas pastorales, tanto a nivel local como internacional».
Precisamente, el Santo Padre encargó la preparación de los textos para el vía crucis en el Coliseo a Sor Eugenia Bonetti, misionera de la Consolata y presidente de la Asociación Slaves no more (Nunca más esclavas).
Bonetti, que desde hace dos décadas combate en primera línea la trata acogiendo a las mujeres, sobre todo migrantes que han caído víctimas de las redes de tráfico de personas, fundó en 2012 esta asociación en Italia que lucha contra cualquier forma de violencia, abuso y discriminación contra las mujeres. La monja italiana será una de las participantes de esta conferencia internacional.