El Vaticano reducirá a cero sus emisiones netas antes de 2050
En un videomensaje a la Cumbre de Ambición Climática 2020, el Papa Francisco se ha comprometido a seguir promoviendo en todo el mundo «una educación para la ecología integral»
El Vaticano, con el Papa Francisco a la cabeza, está implicado también en la vertiente más institucional de la lucha contra el cambio climático. Por ello este sábado, en un videomensaje enviado a la Cumbre de Ambición Climática 2020 que se celebra este 12 de diciembre de forma virtual, ha detallado los objetivos a los que se compromete este pequeño estado.
El Papa ha adelantado, según informa EFE, que el Vaticano se compromete a reducir a cero las emisiones netas antes de 2050. En una nota publicada poco después, el Vaticano ha explicado que esto se hará tanto reduciendo sus emisiones de gases de efecto invernadero como promoviendo la absorción de CO2, por ejemplo con proyectos de reforestación. Estas medidas reforzarán otras muchas implantadas hasta ahora, como la instalación de paneles fotovoltaicos, las reformas en sus instalaciones para una mejor eficiencia energética, la reducción de los residuos y los progresos en su separación, el desarrollo de un censo de árboles, la sustitución del parque automovilístico por modelos eléctricos o híbridos, o la promoción del consumo responsable con la abolición el año pasado del uso de plásticos de un solo uso.
Hacia un modelo cultural de sostenibilidad
Asimismo, el Santo Padre ha asegurado que promoverá «una educación para la ecología integral». Esta faceta es importante porque, además de «las medidas políticas y técnicas», es necesario favorecer «un modelo cultural de desarrollo y de sostenibilidad centrado en la fraternidad y en la alianza entre el ser humano y el ambiente». En este marco encajan iniciativas del Santo Padre como el Pacto Educativo Global que ha propuesto a los centros católicos de todo el mundo, donde estudian más de 70 millones de niños y jóvenes.
También el encuentro Economía de Francisco, que en noviembre reunió a jóvenes economistas, empresarios, expertos en finanzas y en el mundo del trabajo para promover «nuevos caminos que superen la pobreza energética, que pongan el cuidado de los bienes comunes en el centro de las políticas nacionales e internacionales, y que favorezcan la producción sostenible también en países con baja renta compartiendo tecnologías avanzadas apropiadas».
Los más afectados, los pobres
«Ha llegado el momento de un cambio de rumbo» en la defensa del medioambiente «para no robar a las nuevas generaciones la esperanza en un futuro mejor», insistió el Papa durante su alocución virtual. «La actual pandemia y el cambio climático, que tienen una relevancia no solo ambiental, sino también ética, social, económica y política, inciden, sobre todo, en la vida de los más pobres y frágiles».
Esta realidad subraya, en palabras del Pontífice «nuestra responsabilidad de promover, con un compromiso colectivo y solidario, una cultura del cuidado, que ponga en el centro la dignidad humana y el bien común». Por lo que «además de adoptar algunas medidas que no pueden aplazarse más, es necesaria una estrategia que reduzca a cero las emisiones netas».
La Cumbre de Ambición Climática 2020 que se está celebrando este sábado de manera virtual con la participación de 75 países, coincide con el quinto aniversario del Acuerdo de París y es la antesala de la Conferencia de la ONU sobre el Cambio Climático COP26.