Cecilia Pilar Gracia: «Manos Unidas tiene que rejuvenecerse y ser también la ONG de los jóvenes» - Alfa y Omega

Cecilia Pilar Gracia: «Manos Unidas tiene que rejuvenecerse y ser también la ONG de los jóvenes»

La presidenta de la entidad acaba de ser reelegida por unanimidad para otros tres años. Como prioridad, ha marcado la digitalización de la entidad, el refuerzo del voluntariado joven y la identidad católica de la misma

José Calderero de Aldecoa
La presidenta recibió un ramo de flores tras ser reelegida
La presidenta recibió un ramo de flores tras ser reelegida. Foto: Manos Unidas.

¿Cómo valora su renovación por unanimidad durante la Asamblea de Delegadas?
Es un orgullo para mí que mis compañeras decidieran, por unanimidad, que yo siguiera tres años más dirigiendo la organización. Tomo el reto con muchas ganas, también porque me siento apoyadas por cada una de ellas y ellos. Al final, esto es una cosa de todos. Nos apoyamos los unos a los otros, y esto es fundamental para que la organización tenga la cohesión que queremos.

En su discurso en la Asamblea habló de que la digitalización de la organización va a ser un objetivo prioritario para este mandato. ¿Hasta qué punto ha influido el pontificado de León XIV y su interés en el ámbito de la tecnología?
Obviar que esto es necesario sería un error absoluto. Es verdad que nosotros nos incorporamos tarde al tema de la digitalización, pero desde hace dos años nos decidimos a mejorar en este ámbito y hay que decir que hemos avanzado bastante gracias también al trabajo en conjunto con la Fundación Capgemini.

Para nosotros es un tema importante, porque incide en la coordinación con nuestros socios locales, con las delegaciones y en el trabajo diario del servicio central. Necesitamos un seguimiento de todas las facetas de los proyectos y con la inteligencia artificial, por ejemplo, esta labor se puede ver impulsada. Como digo es un tema que ya veníamos trabajando, pero en el que ahora seguro que tenemos nuevas luces en el pontificado del Papa.

¿Qué supone para ustedes que ahora tengamos un Papa misionero?
Para nosotros es muy importante, porque no solo es que conozca a fondo tanto la realidad del norte como del sur, sino que entiende bien el trabajo de los misioneros, que son nuestros principales socios locales. En este sentido, se puede destacar el apoyo que brindó al trabajo de Manos Unidas con Radio Cutivalú para la prevención del delito de trata y la promoción de una vida libre de violencia para las mujeres.

Otra de las cuestiones de las que habló en la Asamblea de Delegadas fue del tema del voluntariado joven. ¿Qué peso tiene este en el conjunto de la organización?
Se puede decir que está en crecimiento. A día de hoy el mayor peso está en el voluntariado de más edad, pero está claro que Manos Unidas tiene que rejuvenecerse y ser también la ONG de los jóvenes. Y luego la idea es mezclarnos, porque ellos nos aportan entusiasmo y alegría y nosotros la experiencia que hemos adquirido en todos estos años. Creo que esa mezcla puede beneficiar muchísimo a la organización en su trabajo. Ahora mismo tenemos casi 40 delegaciones que ya tienen grupos de jóvenes.