Carta de apoyo al Papa de Blázquez: «Santo Padre, no está solo; la Iglesia pide por usted»

El presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE), el cardenal Ricardo Blázquez, ha escrito una carta al Papa Francisco en nombre de todos los obispos españoles en la que le manifiesta su «afecto, cercanía y apoyo».

En la misiva, el también arzobispo de Valladolid recuerda cómo «anunciar el Evangelio con fidelidad y libertad, denunciar con valentía lo que Dios reprueba, pedir humildemente perdón por los pecados y equivocaciones de los miembros de la Iglesia, clérigos y laicos, se manifiesta en ocasiones en forma de cruz muy pesada para usted unido en comunión con Jesucristo el Buen Pastor».

En este sentido, Blázquez da gracias a Dios «por su incansable trabajo pastoral y por su dedicación al ministerio que el Señor le ha confiado».

«Santo Padre, no está solo; la Iglesia pide por usted como en otro tiempo por Pedro», asegura el presidente de la CEE. Concretamente, «pedimos al Señor que continúe sosteniendo a usted en las luchas diarias por el Evangelio, que le otorgue su paz y la capacidad para decir a los cansados una palabra de aliento», añade.

La carta, que finalizada con el deseo de una provechosa visita a Dublín con motivo del Encuentro Mundial de las Familias, está fechada el 23 de agosto y escrita desde la ciudad de Medellín (Colombia), hasta donde viajó Blázquez junto al secretario General de la CEE, José María Gil, para participar en el congreso eclesial Medellín 50 años que ha conmemorado la II Conferencia General del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM).

Apoyo del cardenal Osoro

La carta del presidente de la Conferencia Episcopal Española se ha hecho pública tan solo dos días después de que el cardenal Carlos Osoro, escribiera un tuit de apoyo al Santo Padre.

En su mensaje, el arzobispo de Madrid se deshacía en elogios hacia Francisco y le aseguraba su oración: «Papa Francisco, eres valiente en desvelar la verdad del Evangelio y mantener viva la misión de la Iglesia: dejas entrar, devuelves dignidad, eres pobre y estás con los pobres, abres los ojos, pides perdón. Rezamos por ti».