¿Cómo se vive el jubileo a 30 grados bajo cero?
Para quienes no puedan ir a Roma, hay peregrinaciones entre las nueve parroquias del país. Están separadas por cientos de kilómetros
Un frío extremo, con temperaturas de hasta 30 grados bajo cero, no impidió que la comunidad católica de Mongolia celebrara con fervor la apertura del Jubileo de 2025. Según ha explicado esta semana a los medios vaticanos el cardenal Giorgio Marengo, prefecto apostólico en el país, los fieles se reunieron al comienzo del año jubilar en la catedral de los santos Pedro y Pablo de Ulán Bator. Después, «partimos de la gran cruz que se utilizó para la misa papal durante el viaje apostólico de Francisco en septiembre de 2023». Es el modo en que se sumaron el año jubilar, aunque seguirán organizando muchas más actividades este año.
Cabe destacar que la pequeña comunidad católica del país, formada por apenas 1.600 bautizados en una población de 3,2 millones de habitantes, se ha preparado mucho para esta cita. «El leitmotiv de estas actividades fue el concepto que en inglés llamamos Hoping Together [Esperando Juntos]. Fue también el tema de la visita papal de hace casi dos años». Para Marengo, esta celebración es «un ejercicio de esperanza, un deseo de aceptar la invitación jubilar a mirar al futuro con ojos llenos de fe, sin desanimarse nunca».
El cardenal ha subrayado en Vatican News la importancia de la formación continua durante este año santo. «Estamos pensando en una publicación plegable con explicaciones sobre cómo obtener las indulgencias y con la que podamos poner de relieve el verdadero sentido del camino de conversión». Además, ha enfatizado la dimensión de la caridad, pues «las obras de misericordia y ofrecer al Señor las propias dificultades y sufrimientos no son cosas triviales».
Dada la lejanía y los costes del viaje, pocos fieles de Mongolia podrán peregrinar a Roma, pero la prefectura ha ideado alternativas locales. «Las gracias del jubileo nos alcanzan allí donde estamos», ha incidido Marengo. Se organizarán peregrinaciones entre las nueve parroquias del país, algunas separadas por cientos de kilómetros. Para ello, se creará un «pasaporte jubilar», un documento que los fieles deberán completar al visitar cada parroquia.
El jubileo en Mongolia se celebra bajo la mirada de la Virgen María. En la catedral de Ulán Bator se encuentra una pequeña estatua de madera de la Madre del Cielo, descubierta milagrosamente en un vertedero por una mujer no católica. «La catedral asume cada vez más un papel espiritual fundamental para los fieles, que pueden acudir ante esta pequeña estatua de madera y confiar su vida a la Virgen María», ha concluido Marengo.