Para Cáritas no hay mejor comunicación «que la gente nos vea haciendo el bien»
El exsecretario general de Cáritas, Sebastián Mora, receta compaginar verdad con caridad, uso digno de las imágenes, rigor en las cifras y ejemplaridad en el trato
«Cuando tratamos de gestionar nuestra comunicación para el gran público —que debemos hacerlo—, tenemos que hacerlo con mucho cuidado y tiento porque, si descafeinamos el mensaje, acabamos descafeinando aquello que pertenece a nuestra identidad más profunda. Si no, podemos acabar haciendo de la caridad y la justicia solo una anécdota». Es una de las claves que compartió con los técnicos de Cáritas Madrid la semana pasada Sebastián Mora, profesor de la Universidad Pontificia Comillas, en una ponencia titulada Otra comunicación es posible: ética, escucha y esperanza.
Durante su conferencia, el exsecretario general de Cáritas Española parafraseó al Papa Francisco, quien decía que «somos lo que comunicamos y la verdad sin caridad hiere y la caridad sin verdad desorienta». «Para Cáritas este es un elemento fundamental», sentenció.
Ser responsable no es decir poco
El doctor en Sociología por la Universidad de Zaragoza advirtió de que «la comunicación es lo que decimos y lo que callamos». Y amplió esta idea alegando que «cuando decidimos guardar silencio sobre algo porque pensamos que puede sentar mal políticamente o a nuestros donantes, estamos faltando a nuestra responsabilidad». Por tanto, sostuvo que «tener responsabilidad sobre lo que digamos no significa que, cuanto menos diga, mejor».

Durante su charla en el Centro de Estudios Sociales que Cáritas tiene en Madrid, Sebastián Mora pidió también hacer un tratamiento ético de las imágenes para las campañas. «Si coges a muchas oenegés de España, cuando hay una gran catástrofe muestran niños llorando o niños muertos», ejemplificó. A lo que añadió la pregunta: «¿Estas imágenes dignifican o son para captar la atención del público y tener más donantes?».
Rigor en las fuentes y en los números
También compartió alguna anécdota personal en favor del rigor. Por ejemplo, cuando se presentó el Informe FOESSA de 2014, tuvo un debate con un periodista que le aseguraba: «No me creo vuestros números porque tengo una prima que es voluntaria de Cáritas en Ávila y dice que va menos gente al proyecto». A lo que el sociólogo le respondió: «Si de todo lo que dice usted en su medio su fuente de verificación es una prima en Ávila, me echo a temblar. Este es un proyecto hecho por 50 investigadores de universidades con metodología y parametrizado».

Hilando con esta pequeña discusión, alegó que «tenemos que ser muy escrupulosos en el ámbito de las oenegés con los números». «¿Podemos verificar lo que decimos?», emplazó a los presentes lamentando que, en algunas ocasiones, hay parroquias que no registran con exactitud a cuántas personas atienden.
«Solo os falta quereros entre vosotros»
Sebastián Mora compartió otra anécdota en la que mostraba a un amigo suyo alejado de la Iglesia el día a día en Cáritas. «Estoy impresionado con todo lo que hacéis, ya solo os falta una cosa: que os queráis entre vosotros». Por lo que recordó la importancia de tratarse internamente «con caridad y mansedumbre».
Finalmente, resumió que, como comunicación, «no hay nada que sustituya a que la gente nos vea haciendo el bien».