La Iglesia se vuelca con la ayuda humanitaria en Gaza tras el acuerdo de paz - Alfa y Omega

La Iglesia se vuelca con la ayuda humanitaria en Gaza tras el acuerdo de paz

10.000 botes de leche de bebé o 5.000 antibióticos, la Iglesia se vuelca con la ayuda humanitaria en Gaza y no tampoco se olvida de Ucrania. «Entregar leche de fórmula no solo se trataba de comida, sino de devolver la vida y la esperanza»

José Calderero de Aldecoa
Un bebé dormido toca con su mano un bote de leche infantil.
Un niño junto a un bote de leche infantil entregado por la entidad de la Iglesia. Foto: Cáritas Jerusalén.

Tras el anuncio oficial del fin de la guerra en Gaza, y la luz verde para poder repartir ayuda humanitaria, Cáritas Jerusalén ha sido una de las primeras organizaciones en responder a la hambruna que padece la población de la Franja. Casi de forma inmediata tras el alto el fuego, la entidad caritativa de la Iglesia ha movilizado a sus equipos médicos para entregar 10.000 latas de leche de fórmula a familias con recién nacidos y niños pequeños. La distribución se ha llevado a cabo a través de la red de puntos médicos de Cáritas en Gaza, garantizando que la ayuda llegara de forma rápida y segura.

Una madre con sus dos hijos sonríe tras recibir un bote de leche infantil.
Una familia feliz tras recibir la ayuda. Foto: Cáritas Jerusalén.

Durante meses, la guerra y el bloqueo restringieron gravemente el acceso a suministros esenciales, dejando a miles de bebés desnutridos y a madres con dificultades para alimentar a sus hijos. «Esta acción refleja nuestra misión y compromiso con la dignidad humana», ha declarado Anton Asfar, secretario general de Cáritas Jerusalén. «Desde el primer día después de la guerra, nuestros equipos han trabajado incansablemente para apoyar a la población de Gaza, especialmente a los más vulnerables: niños, madres y ancianos. Entregar leche de fórmula no solo se trataba de comida, sino de devolver la vida y la esperanza».

Junto con la ayuda alimentaria, los equipos médicos de Cáritas Jerusalén continúan operando en el sur de Gaza, brindando atención primaria de salud, apoyo psicosocial y ayuda de emergencia a las familias desplazadas y afectadas. En este sentido, la organización mantiene «una estrecha coordinación con las instituciones sanitarias locales y las iglesias aliadas para garantizar el flujo continuo de asistencia humanitaria a través de corredores seguros y accesibles», ha explicado en un comunicado.

Ayuda papel

El Papa también ha querido aprovechar de forma inmediata la apertura de los puestos fronterizos para enviar ayuda concreta a la población de Gaza, por la que no ha dejado de preocuparse desde que fue elegido para suceder a Francisco. Concretamente, León XIV ha mandado 5.000 dosis de antibióticos para los niños enfermos a través de la Limosnería Apostólica. El Patriarcado latino de Jerusalén ha sido el encargado de repartir los medicamentos sobre el terreno.

«Damos seguimiento a las palabras contenidas en la exhortación apostólica Dilexi te dedicada a los pobres», ha afirmado el cardenal Konrad Krajewski, prefecto del Dicasterio para el Servicio de la Caridad. «Es necesario actuar concretamente, prestar atención a los necesitados».

La furgoneta de Cáritas Jerusalén cargada hasta arriba con ayuda humanitaria
La furgoneta de Cáritas Jerusalén cargada hasta arriba con ayuda humanitaria. Foto: Cáritas Jerusalén.

Ucrania en el corazón del Papa

La ayuda del Papa a Gaza se suma a la que hace unos días envió a Járkov (Ucrania), a donde llegaron unos paquetes blancos con las banderas vaticana y ucraniana. Tenían la inscripción, en italiano y ucraniano, «Regalo del Papa León XIV al pueblo de Járkov».

En su interior iban conservas, aceite, pasta, carne e incluso productos de limpieza. «Es la forma que tiene el Pontífice de estar cerca del sufrimiento y el dolor de un pueblo, agotado por años de guerra, que aún no puede vislumbrar la luz de la paz».