Francisco insta a los poderosos del mundo a prohibir las armas autónomas
El Papa ha reclamado en el G7 que la inteligencia artificial no se olvide de la ética para que contribuya a generar una «cultura del encuentro» y no una «cultura del descarte»
El Papa Francisco, a sus 87 años, está viviendo este viernes una jornada extenuante. Tras sus reuniones de esta mañana en el Vaticano con el presidente de Cabo Verde, José Maria Neves, y con más de 100 cómicos, entre ellos Whoopy Goldberg y Jimmy Fallon o las españolas Cristina Castaño, Sara Escudero y Victoria Martín, ha viajado en helicóptero hasta Bríndisi, en el sur de Italia, donde los líderes políticos de los países más poderosos del mundo están reunidos en la cumbre del G7. Francisco ha aterrizado en el lujoso resort de Borgo Egnazia a las 12:10 horas y ha sido acogido por la primera ministra italiana, Giorgia Meloni.
El Santo Padre ha tomado la palabra en la llamada sesión outreach, donde además de los líderes de los siete países más industrializados del mundo —Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Reino Unido y Japón— también estaban presentes otros políticos de gobiernos externos, como el de Argentina, Javier Milei, quien le ha dado un abrazo.
En su discurso les ha instado a que prohíban el uso de las armas autónomas o robots asesinos, que operan sin la mediación humana en los conflictos bélicos. Al tiempo, ha alertado del peligro de que la inteligencia artificial favorezca «la cultura del descarte».
«Ninguna máquina debería elegir jamás poner fin a la vida de un ser humano», ha afirmado el Pontífice en su amplio discurso ante los líderes del foro intergubernamental. Ha añadido a este respecto: «En un drama como el de los conflictos armados, es urgente replantearse el desarrollo y la utilización de dispositivos como las llamadas armas autónomas letales para prohibir su uso, empezando desde ya por un compromiso efectivo y concreto para introducir un control humano cada vez mayor y significativo».
Francisco —que se ha convertido así en el primer Pontífice en participar en el G7— también ha señalado que «la llegada de la inteligencia artificial representa una auténtica revolución cognitivo-industrial, que contribuirá a la creación de un nuevo sistema social caracterizado por complejas transformaciones de época».
«Por ejemplo, podría permitir una democratización del acceso al saber, el progreso exponencial de la investigación científica, la posibilidad de delegar a las máquinas los trabajos desgastantes». Pero ha alertado de que «al mismo tiempo, podría traer consigo una mayor inequidad entre naciones avanzadas y naciones en vías de desarrollo, entre clases sociales dominantes y clases sociales oprimidas, poniendo así en peligro la posibilidad de una cultura del encuentro y favoreciendo una cultura del descarte».
Antes de pronunciar su discurso, ante todos los líderes políticos presentes, el Papa se ha reunido con el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, en el marco de los diez encuentros bilaterales en los que ha participado. Abordaron la próxima Cumbre Mundial por la Paz en Ucrania que se desarrollará este fin de semana en Burgenstock, Suiza. «Hablamos de las consecuencias de la agresión rusa contra Ucrania, del terrorismo aéreo ruso y de la difícil situación en el sector energético… y de las expectativas de la Cumbre Mundial por la Paz», ha explicado Zelenski en un comunicado en las redes sociales.
Según la Oficina de Prensa del Vaticano, el Papa —que ha aterrizado en el lujoso resort de Borgo Egnazia a las 12:10 horas— ha comenzado su agenda política con un encuentro con la directora del FMI, Cristalina Georgiana. También se ha entrevistado con el presidente francés Emmanuel Macron y con el canadiense Justin Trudeau.
En cambio, con el presidente estadounidense, Joe Biden, se verá en torno a las 19:00 horas del viernes, antes de que el Papa emprenda el regreso al Vaticano. Esta reunión privada será la última de una serie de encuentros que también incluirán al turco Recep Erdogan, al brasileño Lula da Silva, al argelino Abdelmadjid Tebboune o el keniano William Samoei Ruto. El Papa Francisco ha sido uno de los protagonistas más esperados del G7, que concluirá el sábado 15 de junio en la localidad turística del sur de Italia.