Después de haber hecho un alto en el camino durante el verano, aquí estamos nuevamente para continuar dando noticias del Sínodo, cuya Asamblea General comenzará el 4 de octubre.
A medida que transcurren los días, la preparación se hace más intensa en cuanto a concreción de datos de cómo se va a desarrollar dicho encuentro. Ya tenemos en nuestras manos, porque está publicado hace tiempo, el documento que va a ser el instrumento de trabajo a lo largo de toda la Asamblea.
También en el mes de julio salió a la luz la lista de participantes en el Sínodo, con especificación de diversos grupos de procedencia según responsabilidades jerárquicas y otras, más un grupo de personas directamente invitadas por el Papa y un grupo amplio de expertos y facilitadores necesarios para la metodología que se quiere implementar.
Todo se va disponiendo en cuanto a contenidos y logística; el medio es el mensaje y se desea que la forma de trabajo corresponda a lo que se pretende: escucha, conversación espiritual, discernimiento… para llegar mejor a los ejes sinodales: comunión, participación y misión. Trabajaremos en grupos de diez a doce personas, por lenguas y en mesas redondas, y cada uno será acompañado por una persona que modere los diálogos, cuidando de que se puedan llevar a cabo los objetivos previstos.
El Sínodo comenzará oficiosamente este sábado, 30 de septiembre, con una vigilia ecuménica de oración en la plaza de San Pedro. Los días 1, 2 y 3 de octubre serán de retiro espiritual en Sacrofano, cerca de Roma. Y el día 4 se iniciarán las sesiones de trabajo propiamente dichas, que concluirán el 29 del mismo mes.
Deseamos abrir el corazón a la escucha del Espíritu para que ilumine nuestros pasos en bien de una Iglesia sinodal.