Y la Virgen visitó el vertedero de Luján
La Iglesia exige que se desbloquee la transformación del mayor basural de Argentina en un centro mediambiental
En Argentina, en 1630, una imagen de la Inmaculada se quedó a la vera del río Luján cuando la carreta que la llevaba se negó a avanzar. Su fama creció tanto que se convirtió en la patrona del país. En ese lugar, a 70 kilómetros de Buenos Aires, se terminó construyendo una inmensa basílica y, en torno a ella, una ciudad. Creció la población, y hace 50 años en la periferia de Luján surgió un vertedero, al empezar a volcar basura e incluso desechos de las cloacas en los agujeros que quedaban tras extraer materiales para construir caminos.
Aún hoy cientos de familias recurren a este basural, el más grande del país, para sobrevivir. Recogen alimentos que otros descartan y venden material reciclable. «Mujeres, niños y hombres trabajan en condiciones inhumanas. Algunos son la segunda generación» de su familia que lo hace, escribió el obispo de Mercedes-Luján, Jorge Scheining, con motivo de la peregrinación y Misa que se organizó el pasado 8 de julio desde la basílica de Luján al vertedero. El objetivo era pedir que los tribunales desbloqueen el proyecto público de saneamiento del suelo y reconversión del vertedero en el centro medioambiental Laudato Si. «Es una causa noble y necesaria», sentenció el obispo en la carta que, al no poder participar, dirigió a Sergio Almada, de la Sociedad de Fomento del Barrio de San Pedro, el más cercano al basural.
A dos cuadras escasas de una nube de un humo blanco que emerge de miles de bolsas de basura Ivo, miembro de la cooperativa de recicladores, describe cómo el proyecto va a cambiar sus condiciones de vida: «Vamos a tener guardería, baños, una cinta para reciclar y todas las herramientas y condiciones necesarias. Justo sobre esta tierra en la que estamos proyectamos una gran compostera». Un poco más allá, una reserva de árboles. Pero, sobre todo, «ya no habrá quema» de residuos a cielo abierto, que desde hace medio siglo viene afectando a la salud de niños y adultos. Los vecinos apoyan el proyecto. Pero para que avance necesitan que el tribunal de alzada de San Martín rechace el recurso presentado por los empresarios Viviana Novelle —también política local— y Carlos Aníbal Reyes. Alegan que la reforma afecta a los terrenos donde realizan actividades agropecuarias. Tierras que, en realidad, son propiedad del Estado.
Llevando a hombros una imagen de la Virgen de Luján y de su primer custodio, Manuel Costa de los Ríos, los peregrinos caminaron cinco kilómetros bajo la llovizna. A continuación el sacerdote Sergio Gómez Tey celebró la Eucaristía. El centro ambiental, subrayó, es un proyecto de toda la comunidad «por el que debemos luchar igual que por la patria», dijo aludiendo a la celebración, ese domingo, del Día de la Independencia. En la Misa también participó el pastor evangélico Pablo García, que pidió rezar «para que la gracia de Dios actúe sobre las personas que están impidiendo que continúe la obra de reconversión».