Un millar de personas despiden a Vadell en Mallorca

Un total de 1.200 personas y 120 sacerdotes han despedido este martes en la catedral de Mallorca al obispo auxiliar de Barcelona, el mallorquín Antoni Vadell, fallecido el pasado 12 de febrero tras una larga enfermedad. Se trata de un segundo funeral después del ya celebrado en Barcelona hace unos días.

En el funeral de corpore in sepulto, presidido por el obispo diocesano, Sebastià Taltavull, han participado también el arzobispo de Barcelona, el cardenal Juan José Omella; el nuncio apostólico de la Santa Sede, Bernardito Auza; el obispo de Ibiza, Vicens Ribas; el obispo emérito de Orihuela-Alicante, Jesús Murgui, y los obispos auxiliares de Barcelona, Javier Vilanova y Sergi Godo. Asimismo, han participado algunas autoridades como la delegada del Gobierno en Baleares, Aina Calvo, o el alcalde de Palma, José Hila.

Previamente a la ceremonia, desde las 10:00 hasta las 15:00 horas, la catedral ha instalado una capilla ardiente en el altar mayor de La Seu, por la que han pasado más de 1.000 personas, según informa Europa Press.

«Fe madura y valiente»

«La vida de nuestro hermano Antonio, y de manera muy especial el tiempo de la enfermedad, ha sido una catequesis que ha ido dando respuesta a los enigmas que se podían presentar », ha asegurado Taltavull durante una homilía en la que también ha destacado su «testimonio inquebrantable de fe» y su «fe madura y valiente, capaz de saber dar razón de la esperanza».

El obispo de Mallorca ha recordado también la frase que Vadell acogió durante el momento de su enfermedad: «Sembremos, que después se recogerá». Sobre esto, ha destacado que «podemos decir con gozo que, de su trabajo apostólico, hoy ya recogemos y recibimos el fruto, un fruto que agradecemos de todo corazón y que presentamos en esta Eucaristía».

Por último, Taltavull ha hecho referencia al lugar en el que Vadell pidió ser enterrado, el santuario de la Mare de Déu de Gràcia, «un lugar muy cercano a su pueblo y muy especial por su entorno natural», ha detallado, concluyendo la homilía con una oración en memoria de su «hermano, amigo y obispo Antonio».

Despedida por Twitter

La presidenta del Gobierno balear, Francina Armengol, también se ha despedido del obispo mallorquín. En un mensaje en Twitter, la presidenta ha recordado a Vadell como una persona «amable, generosa y cercana», un texto que ha acompañado de una foto en la que se le puede ver en la capilla ardiente.

«Así era el obispo Antoni Vadell, una persona querida que nos deja demasiado pronto, pero también un gran recuerdo a todos y todas. Descansa en paz, Toni», ha concluido.