Un cristiano no puede ser antisemita - Alfa y Omega

Un cristiano no puede ser antisemita

Redacción

El Papa Francisco ha pedido vigilancia para que «no recobren vida formas de intolerancia y de antisemitismo. Es una contradicción que un cristiano sea antisemita: sus raíces son hebreas». Lo hizo el pasado viernes, al recibir a una delegación de la comunidad judía de Roma con motivo del 70 aniversario de la deportación de los judíos de la ciudad. En sus palabras, subrayó que, durante siglos de convivencia en Roma, se han dado frecuentes incomprensiones e injusticias. Pero también, en los últimos decenios, han surgido «relaciones amigables y fraternas», fruto tanto del Concilio Vaticano II como de «la tragedia común de la guerra», cuando la Iglesia, por iniciativa de Pío XII, abrió iglesias y conventos para salvar a los judíos. El obispo de Roma pidió una «verdadera y concreta cultura del encuentro», en torno a lo que nos une, como el Decálogo, frente a una sociedad marcada por el pluralismo.

El encuentro se produjo mientras crece la especulación sobre un próximo viaje del Papa a Tierra Santa. Según las últimas noticias, publicadas por el periódico Jerusalem Post, esta visita podría ocurrir en marzo de 2014. El Santo Padre ha recibido ya la invitación tanto de Israel como de la Autoridad Nacional Palestina –que hoy, previsiblemente, le reiterará su presidente, Abú Mazen–. Se espera que en el viaje participen también el Patriarca ecuménico de Constantinopla, Bartolomé I, para celebrar los 50 años del encuentro entre el Patriarca Atenágoras y el Papa Pablo VI en Jerusalén; y el rabino argentino Abrahám Skorka, amigo del Papa.