«Somos iguales: nosotros también sentimos y amamos» - Alfa y Omega

«Somos iguales: nosotros también sentimos y amamos»

Doce personas con discapacidad intelectual de Palencia escriben un libro sobre las emociones «para hacer una sociedad mejor y más inclusiva»

Juan Luis Vázquez Díaz-Mayordomo
«Leer con ellos es apasionante», dice Alma, la coordinadora del proyecto (a la derecha). Foto: Alma Arconada

«Nos da mucho subidón ver nuestros nombres en el libro. Nos hace sentirnos mejores y superimportantes. Es muy bonito», afirman Rosi y Sergio, dos de las doce personas con discapacidad intelectual que han escrito el libro Un paseo por el jardín de mis emociones, una obra en la que han dado lo mejor de sí mismas «para contar cosas que nos interesan a todos, con discapacidad o sin ella».

Todos ellos han aportado sus propias experiencias para construir el personaje principal de la novela, Azahar, una chica con discapacidad intelectual que atraviesa tres situaciones vitales que traen consigo emociones intensas: fallece su madre, se enamora y tiene problemas de convivencia. Será en ese contexto donde encontrará las habilidades que necesita para gestionar estas situaciones.

«En el libro contamos nuestras experiencias. Eso nos ha ayudado a la hora de escribirlo y esperamos que les ayude a otros cuando lo lean», afirman Rosi y Sergio. «Lo que contamos son cosas por las que puede pasar cualquiera», añaden, para subrayar que «en realidad todos somos iguales. Nosotros también sentimos y amamos. Todos tenemos emociones».

El proyecto nació como resultado de las actividades de lectura y escritura que han ido realizando en los últimos años en la biblioteca pública de Palencia. Formaron juntos un club de lectura en alto y poco a poco fueron creciendo, hasta llegar a participar en maratones de cuentos, en representaciones y en talleres de poesía y escritura creativa. «Fueron naciendo inquietudes y una de ellas fue la de escribir», señala Alma Arconada, coordinadora del proyecto. «Al principio no pretendíamos escribir un libro, sino narrar nuestra propia historia. La escritura hace que los chicos sean los protagonistas de sus vidas, sueños y alegrías».

«Compartimos la vida con ellos»

Además de Rosi y Sergio, están Elena, Soledad, David, Pedro Manuel, Consuelo, Alejandro, Estíbaliz, Marco Antonio, Jesús y José Antonio, todos ellos autores del libro y vinculados al centro Villa San José, que regentan los guanelianos en la ciudad de Palencia. «Aquí compartimos la vida con ellos», afirma su superior, Francisco Javier Altuna. El centro comprende dos viviendas, una residencia y un taller orientado al empleo, y en él atienden a 60 personas, desde los 21 hasta los 68 años. Aquí llegaron los guanelianos en 1976 para mejorar la vida de las personas con discapacidad intelectual y de sus familias. Así, en un proceso que dura varios años, algunos se encuentran ya capacitados para dar el salto: vivir en un piso en la ciudad y encontrar un trabajo.

«Es nuestra historia»

Para dar vida a Azahar, los doce autores «han tenido que inventarse una vida de ficción haciendo presentes sus vivencias. Han escarbado en sus emociones para poder profundizar en las de los personajes del libro», cuenta Arconada.

¿Cómo se puede armar un argumento con tantas biografías y tan distintas en juego? «Hay elementos que han sido consensuados, como los nombres de los personajes, que eran sometidos a votación», desvela la coordinadora, pero hay otras partes «en las que yo ponía un marco a la escena y les dejaba un rato a solas escribiendo, ahondando en su interior e imaginando, y luego lo compartíamos. Yo lo recogía todo después y lo volcaba en el papel, y luego ellos me daban su aprobación o no. Así, poco a poco me iban dando su feedback y avanzábamos en la escritura».

Hasta la fecha todas las opiniones que han llegado son buenas. «Esta historia tienen que llegar a la gente, porque les puede aportar mucho», fue lo que les dijo al leerlo la directora de la biblioteca.

Otro de los alicientes del libro es que tiene el sello internacional de lectura fácil, una homologación que permite una lectura adaptada para hacer más comprensibles los textos a personas con dificultades de comprensión. «Hasta hace poco, cuando estos chicos leían algo, tenía que ser más bien infantil, pero ahora ya hay novelas y clásicos a su alcance, y leerlos con ellos es apasionante».

Rosi y Sergio están entusiasmados con la entrevista. Foto: Alma Arconada

De este modo, con esta iniciativa «hemos puesto en valor las capacidades de las personas con discapacidad intelectual, y eso redunda en una sociedad mejor y más inclusiva para ellos», dice Alma Arconada. Además, «es muy alentador». «Ver escrito su nombre en un libro les emociona. Hasta me han dicho que quieren hacer una presentación y firmar ejemplares», dice con humor.

Al concluir la entrevista, Rosi y Sergio se despiden levantando los brazos y exclamando un rotundo: «¡Las personas con discapacidad también valemos!».

Un paseo por el jardín de mis emociones
Autor:

Varios autores

Editorial:

Editorial Eolas

Año de publicación:

2020

Páginas:

50

Precio:

10 €