Saben aquell. Una historia de amor envuelta en chistes

Uno podría pensar, seguramente por prejuicio, que de una película sobre Eugenio, el humorista, no se debe esperar gran cosa. El que piense así se llevará una formidable sorpresa. Porque se va a encontrar con una película emocionante, que atrapa al espectador y que hace pensar. A los más jóvenes habrá que contarles que Eugenio era un señor de aspecto lóbrego y lúgubre, vestido de negro, que salía en la tele de los años 1970 y 1980 contando chistes mientras se fumaba un cigarrillo y se bebía una copa. Se hizo famoso por su impasibilidad, su estolidez, su cara funeraria. Consiguió que esa aparente contradicción fuera la clave de su éxito. A veces se quedaba callado delante del micrófono, mirando al público con cara de póquer, y el espectador se desternillaba. Pero la mayoría de los que le conocíamos de verle en programas como el concurso Un, dos tres o en algunos espectáculos en directo, no sabíamos realmente nada de su vida ni de su pasado. En esta película, el veterano David Trueba nos va a ofrecer unas cuantas revelaciones sorprendentes y gratas. Eugenio murió muy joven, con 59 años, en 2001.

La perspectiva dominante que David Trueba elige para meterse en la biografía del humorista es la romántica: el amor entre Eugenio (David Verdaguer) y Conchita Alcaide (Carolina Yuste), su primera mujer. Con ella comenzó su carrera artística en el mundo de la canción. Este periodo nos brinda escenas de gran belleza musical, y Carolina Yuste se erige como una actriz arrolladoramente empática. Casi por casualidad, y debido a una contingencia familiar, una noche en que el dúo —llamado Els Dos— tenía un bolo en un local de copas, Eugenio se vio obligado a actuar solo, tirando de anécdotas y chistes. El público rió a carcajadas y esas carcajadas supusieron un punto y aparte en la vida artística y personal de nuestro protagonista.

Trueba va entrelazando la trayectoria profesional con la historia familiar, estando ambas cimentadas en el amor de la pareja, basado en el apoyo y entrega mutua. Ese idilio sano y luminoso tuvo su prueba de fuego cuando a Conchita le diagnosticaron un cáncer de mama. Sorprende que Eugenio es retratado en el filme como un hombre religioso y que, a pesar del clima social de la Barcelona de los 70, no se aleja de la Iglesia católica. La película nos ahorra los últimos 20 años de su vida, en los que entró en barrena tras el fallecimiento de su esposa en 1980. Esta amputación biográfica nos deja una película llena de luz y de vida, positiva y reconfortante, y en gran parte sostenida por unas interpretaciones impecables de David Verdaguer y de Carolina Yuste. Aunque la cinta es indudablemente una biografía artística, muy bien contada por cierto, el espectador se queda con la sensación de haber visto una de las mejores películas sobre el valor de la familia de los últimos tiempos. Y un retrato nostálgico de lo más entrañable de la España de los 70.

Saben aquell

Director:

David Trueba

País:

España

Año:

2023

Género:

Comedia

Público:

Pendiente de calificación