Parolin inaugura un centro de rehabilitación dedicado a Juan Pablo I: «Acoged con una sonrisa» - Alfa y Omega

Parolin inaugura un centro de rehabilitación dedicado a Juan Pablo I: «Acoged con una sonrisa»

Las 70.000 liras que donó Juan Pablo I antes de ser elegido Papa dieron lugar a un consorcio cuyo última obra atenderá a niños y adultos con discapacidad

Rodrigo Moreno Quicios
Pietro Parolin bendice las instalaciones del Centro de Rehabilitación Juan Pablo I.
Pietro Parolin bendice las instalaciones del Centro de Rehabilitación Juan Pablo I. Foto: Vatican Media.

El cardenal Pietro Parolin, secretario de Estado del Vaticano, inauguró el pasado martes el Centro Ambulatorio de Rehabilitación Juan Pablo I en La Romanina, un barrio humilde del sureste de Roma a tiro de piedra del aeropuerto de Ciampino. La institución ofrecerá atención médica avanzada a niños y adultos con diferentes trastornos o discapacidades.

El Centro de Rehabilitación Juan Pablo I será gestionado por la cooperativa social Medihospes —que forma parte del Consorcio La Cascina— y ofrecerá servicios especializados de neuropsiquiatría, logopedia, psicología y rehabilitación motora. Tanto para niños como adultos. En 256 metros cuadrados, dispone de nueve consultorios y un gimnasio terapéutico.

Enseñó a amar al prójimo

En su discurso al estrenar las instalaciones, Parolin propuso a Juan Pablo I como ejemplo por su «caridad cotidiana y sonriente». En tan solo un mes de pontificado, «enseñó que se ama a Dios amando al prójimo». Después, invitó al personal a «acoger, escuchar y acompañar siempre con una sonrisa».

Pietro Parolin saluda a una usuaria en el centro.
Pietro Parolin saluda a una usuaria en el centro. Foto: Vatican Media.

Durante la inauguración, Stefania Falasca, que aparte de una reputada vaticanista es postuladora de la canonización del ya beato Juan Pablo I, entregó al centro una reliquia ex indumentis. Es decir, elaborada a partir de su vestimenta. Es un fragmento del camisón con el que dormía, se la cedió su sobrina Lina Petri y fue certificada por el arzobispo Diego Ravelli. Será custodiada en una vitrina especial dentro del centro.

La donación que inició todo

Por su parte, Emilio Rossier Fusco, administrador delegado del Consorcio La Cascina, que gestiona este centro, recordó que en 1978 Albino Luciani, antes de ser elegido Pontífice y cuando aún era solo patriarca de Venecia, donó 70.000 liras al incipiente proyecto social de unos universitarios. Más tarde se convirtió precisamente en este consorcio. «Nuestra historia comenzó gracias a su generosidad. Dedicamos este centro a su memoria para continuar su testimonio de cercanía y servicio», reivindicó Fusco.

Pietro Parolin visita las instalaciones.
Pietro Parolin visita las instalaciones. Foto: Vatican Media.

Finalmente, el delegado del alcalde de Roma, Marco Vincenzi, definió el centro como «un espacio de futuro y derecho a la felicidad». Y el presidente regional, Antonello Aurigemma, destacó que «no solo será un lugar de rehabilitación, sino también de escucha y acogida».