Otra Semana Santa sin procesiones
Sevilla y Granada ya han anunciado que suspenden los pasos procesionales por la pandemia. Otras diócesis darán a conocer su decisión los próximos días
Empezó Sevilla y le siguió Granada, y en los próximos días se espera el anuncio de la suspensión de las procesiones de Semana Santa por parte de más diócesis españolas.
El arzobispo de Sevilla, Juan José Asenjo, argumentó la semana pasada que «la persistencia de altos niveles de incidencia» de la COVID-19, unida a las previsiones de distribución de las vacunas, «siguen desaconsejando la concentración de grandes grupos de personas».
A los pocos días, también Granada anunció la suspensión de los pasos, «en comunión con las decisiones del Arzobispado de Sevilla», por lo que implica «la situación excepcional en la que nos encontramos», dijo el arzobispo, Javier Martínez, en un comunicado.
Según Marcelino Manzano, delegado de Hermandades y Cofradías de la diócesis hispalense, las asociaciones cofrades han aceptado la decisión «con serenidad y responsabilidad», y «con mucha confianza» en la autoridad eclesiástica. Es verdad que ha habido «dolor» por la noticia, pero también «mucho sentido eclesial y mucha fe».
«Es algo que se veía venir. No es una decisión que nos guste, pero es comprensible», afirma Noelia Jiménez, de la Federación de Hermandades y Cofradías de Semana Santa de Granada. En las 32 asociaciones de penitencia que representa, la noticia ha caído «en general bien», porque «el arzobispo lo ha ordenado y tenemos que asumirlo». De todos modos, añade, «ya estamos trabajando para la Semana Santa siguiente».
Las demás diócesis andaluzas están pendientes de la reunión que los responsables de las cofradías van a mantener con la Junta de Andalucía el próximo 13 de enero, mientras que en el resto de España se mira la decisión de Sevilla como un previsible anuncio de futuro.
Así, el vicepresidente de Castilla y León, Francisco Igea, ha considerado «prudente no programar actos masivos», en relación a las próximas actividades de Semana Santa. No en vano, en la comunidad castellanoleonesa la cofradía de la Buena Muerte de Zamora ha sido la primera en anunciar la cancelación de su tradicional procesión de Lunes Santo de este año. Y en Cuenca, las 33 hermandades y el obispado decidirán antes de acabe el mes de enero su decisión, «en función de las indicaciones del Ministerio de Sanidad».
«Tenemos un plan B»
Si el año pasado la decisión de cancelar las procesiones se tomó prácticamente rozando ya la Semana Santa, la anticipación con la que se está actuando esta vez está permitiendo a las hermandades trabajar en una alternativa.
«Tenemos un plan B», confirma Noelia Jiménez, de Granada. «Llevamos meses pensando en una posibilidad que, si se aprueba, haremos pública en los próximos días», añade, ya que «el año pasado fue todo muy precipitado, pero ahora estamos a tiempo» de reaccionar.
Cofrades y hermanos de toda España elucubran estos días posibilidades como sacar los pasos por el interior de los templos con restricciones de aforo, e incluso organizar procesiones por la calle con recorridos acotados.
Desde las instituciones civiles no se miran mal estos intentos de visibilizar de algún modo las procesiones. Así, la concejal de Cultura y Turismo de Valladolid ha planteado a la Junta de Cofradías de la ciudad organizar las salidas de las imágenes «por lugares concretos, con asientos designados y aforos limitados en las iglesias», para que las procesiones se realicen «sin peligro para la salud».