Once niños mueren cada semana en el Mediterráneo - Alfa y Omega

Once niños mueren cada semana en el Mediterráneo

Desde UNICEF señalan que, en lo que llevamos de año, al menos 289 menores han muerto en distintos naufragios

Redacción
Zapatillas de un niño, aparecidas en la isla de Lesbos (Grecia). Foto: Reuters / Alkis Konstantinidis.

Hace unos días unos trabajadores que limpiaban la playa se toparon con una visión tremenda: el pequeño cuerpo de un bebé de unos 6 meses. No iba ataviado con ropa de playa, sino con un body y una chaqueta. El estado del cadáver hizo pensar a los investigadores que con toda probabilidad se tratara de una víctima de un naufragio en el Mediterráneo.

Esa niña, cuyo cuerpo pudo ser arrastrado por la marea hasta la playa de Roda de Berà, en Tarragona, forma parte de la lista de menores que han perdido la vida en esos viajes de la esperanza. En concreto, según UNICEF, en lo que va de año prácticamente once niños a la semana han perecido en el Mediterráneo en el intento de arribar a costas europeas, un total de 289. Desde 2018 aseguran que ese número se eleva a los 1.500. Según la Organización Internacional para las Migraciones, una de cada cinco personas muertas o desaparecidas en las rutas mediterránea pueden ser menores de edad.

El doble de llegadas de niños

Con todo, muchos de estos naufragios en la ruta migratoria del Mediterráneo central no dejan supervivientes o ni siquiera quedan registrados. Esto dificulta el cálculo del número real de víctimas infantiles, que probablemente sea aún mayor. UNICEF estima que 11.600 niños y niñas llegaron a las costas de Italia desde África del Norte desde enero de 2023, una media de 428 niños a la semana. Esto significa que se ha duplicado el número comparado con el mismo período de 2022. La mayoría salieron de Libia y Túnez, habiendo pasado antes por enclaves peligrosos en África u Oriente Próximo.

Desde UNICEF consideran que estas cifras son una clara señal de que se deben tomar más medidas para crear vías legales y seguras de acceso al asilo a la vez que se refuerzan las operaciones para rescatar vidas en el mar. «Hay que hacer mucho más para abordar las causas profundas que fuerzan a los niños a arriesgar sus vidas en primer lugar», pidió su directora ejecutiva, Catherine Russell.

Hacia España

Según la Organización Internacional de las Migraciones, entre 2018 y 2022 se contabilizaron 2.739 víctimas y personas desaparecidas en su viaje por mar hacia España. Aunque estos números podrían ser mayores. Durante el primer trimestre de 2023, el 71 % de los niños y niñas que llegaron a Europa a través de esta ruta (3.300), se registraron como no acompañados o separados de sus padres o tutores. Esta situación les expone a un mayor riesgo de violencia, explotación y abuso en rutas tan peligrosas como la del Mediterráneo central. Porque desde que abandonan sus hogares de origen, se ven expuestos a múltiples amenazas y carencias. Además, muchos viajan solos.

Por ello, desde UNICEF reclaman a los gobiernos que mejoren la protección de la infancia vulnerable en el mar y en los países de tránsito, origen y destino de acuerdo con el derecho internacional y la Convención sobre los Derechos del Niño. Piden también a la Unión Europea que garantice esta protección en el Pacto de la Unión Europea sobre Migración y Asilo que se está negociando en estos momentos.