Esperemos que el Obama especialista en escuchar, al que Kap se refiere en la viñeta que ilustra este comentario, además de escuchar sepa y sea capaz de sacar el fruto adecuado de lo que ha escuchado y de ponerlo en práctica, con la seguridad de que sólo beneficios se pueden derivar de ello para el pueblo de los Estados Unidos de América. Resulta sumamente curioso ver cómo alguno de nuestros medios de comunicación, especialista en dar la vuelta a la realidad, ha presentado la audiencia que el Papa Francisco concedió al Presidente Obama: El País ha titulado así: Obama consagra el liderazgo del Papa. Ya ven ustedes lo que son las cosas: ahora el que consagra, por lo visto, es Obama… Sin comentarios.
Una de las enseñanzas prácticas del Papa Francisco que más están llamando la atención, incluso al Presidente Obama, es la que se refiere a su valentía frente a los desafíos económicos y sociales y en defensa de los más desfavorecidos. Aquí en España, entre nosotros, no ha sido destacado como sería de desear el reciente informe de Cáritas que ha denunciado, con el realismo justo y necesario, que España es el segundo país de la Unión Europea con mayor índice de pobreza infantil, superado sólo por Rumanía. De 2011 a 2012, la tasa de pobreza infantil aumentó del 15,6 al 19,4 %; se entiende por personas en riesgo de pobreza las que disponen de un 60 % del promedio de ingresos del resto de la población. Este mismo informe de Cáritas denuncia que ayudar a los hogares sin ingresos costaría 2.600 millones, menos millones que los que parecen ser necesarios para salvar las autopistas infrautilizadas. Los Bancos y las concesionarias deberán pronunciarse sobre la propuesta de Fomento de salvar las autopistas con una quita del 50 %. El humorista Ricardo ha pintado, en El Mundo, una viñeta en la que se ve a Rajoy en una moto de Tele-rescate, que pasa delante de dos niños mendigos y les dice: ¡Pero, bueno, ¿qué os creéis: un Banco o una autopista? Los españolitos de a pié, los de esa clase media que, en resumidas cuentas, es la que siempre paga, ya hemos salvado de la ruina a los Bancos; ahora quieren que salvemos a las autopistas y, mientras tanto, España es el segundo país de la Unión Europea con más niños pobres. Y ¿cuándo nos va a llegar a los salvadores el momento de ser salvados? ¿Y cuándo va a ser, por fin, la reforma pendiente, la reforma de las reformas, que es la del Gasto Público? El Senado de Italia ha aprobado la supresión de las provincias, para ahorrar: se eliminarán 3.000 cargos políticos con un ahorro de unos 800 millones de euros para empezar… Si en Italia es posible hacer estas cosas, ¿por qué aquí no? He mirado estos días el mapa de Italia, por si había pasado algo, y sigue en el mismo sitio. Está muy bien eso de las pequeñas reformas, por ejemplo la del AVE, en algunos de cuyos vagones no se van a poder utilizar los móviles a través de los cuáles el viajero se entera, de Madrid a Sevilla, de toda la vida y milagros de Juanita y del novio de Juanita; está muy bien, aunque uno se pregunta por qué sólo en unos vagones y sólo en el AVE y no en toda la red ferroviaria, Metro incluido; pero la madre de todas las reformas, ¿para cuándo?
Personalmente, me gustaría que alguien me pudiera explicar, por favor, si puede, por qué si yo aparco en una de esas zonas sometidas a la voracidad recaudatoria y confiscadora, aunque no moleste a nadie, me ponen una multa y, si no la pago, me vuelven loco con amenazas de embargo y de ir a juicio y, por ejemplo, a don Arturo Mas y a su mariachi separatista que se pasan las sentencias y las leyes por el Arco de Triunfo ni les chistan. ¿Alguien me lo puede explicar? ¿O por qué sigue en libertad el tal Bolinaga, que lleva año y medio paseándose y tomando chatos de vino, en estado terminal y agónico, por el pueblo donde cometió sus asesinatos? O ¿por qué hay un juez que deja en libertad a los terroristas callejeros que hirieron a 67 policías y dice que no tenían voluntad de ocasionar daños? Pues ¡menos mal! Si llegan a tenerla… J. M. Nieto ha pintado, en ABC, una viñeta enternecedora, en la que se ve a un policía preparado para la kale borroka y una niña al lado de dos gorriones le pregunta: ¿Le ayudo a cruzar la calle? ¡Ah, a los expertos en dardos envenenados que los ven donde no solo no los hay, sino todo lo contrario, que Dios les conserve la vista! «Cree el ladrón…».