ANAR alerta del aumento de llamadas para denunciar violencia contra menores de 10 años
Uno de cada tres menores cuya situación llega hasta el teléfono y chat de la fundación ANAR tiene menos de 10 años, y el 70 % sufre maltrato de algún tipo
Los problemas en la primera infancia, entre 0 y 9 años, representan un 34,1 % de los casos atendidos por el Teléfono/Chat ANAR de la familia y los centros escolares, según ha revelado este martes la fundación ANAR. De ellos, el 70 % sufre violencia y el 75,5 % no recibe tratamiento psicológico. El dato forma parte de un estudio de la institución, que analiza 59.616 casos de menores de edad en riesgo ayudados por esta vía, gracias a las llamadas de adultos que alertan sobre la situación de niños y adolescentes.
Entre 2019 y 2024, la fundación ANAR ha registrado un aumento significativo en el número de casos de niños, niñas y adolescentes que han recibido orientación psicológica, social y/o jurídica. Pero lo más llamativo es que los 20.320 niños y niñas menores de 10 años atendidos constituyen un perfil «marcado por una alta vulnerabilidad y exposición a riesgos graves y persistentes», afirma la fundación.

Dentro de este grupo, la mayoría de los casos atendidos corresponden con varones en edades tempranas, de 6 años de media, que crecen en familias monoparentales, principalmente con la madre. En cuanto a los motivos de las consultas, predomina la violencia contra ellos (70 %), con especial presencia del maltrato físico, maltrato psicológico o emocional, abandono, agresión sexual y violencia de género. Otros problemas que aparecen en las llamadas son los jurídicos, la conflictividad familiar relacionada con separaciones, custodias y regímenes de visitas, y la pobreza infantil.
Problemas de salud mental
El director técnico de la fundación ANAR, Benjamín Ballesteros, ha señalado que «los menores de 10 años son el grupo más especialmente vulnerable». Por ello «es importante reforzar la detección temprana, la respuesta multidisciplinar y el acceso a recursos terapéuticos y jurídicos, así como fortalecer los apoyos a familias monoparentales y los mecanismos de prevención de la violencia en la primera infancia».

Por su parte, la directora de las Líneas de Ayuda ANAR, Diana Díaz, ha desvelado que el principal motivo de llamadas que reciben directamente de los propios menores «es la salud mental». «Se tiende a normalizar problemas en la infancia que requieren un apoyo psicológico especializado y que minimizaría las secuelas en etapas posteriores», ha agregado.
Con respecto a las personas adultas que contactaron con las líneas de ayuda de ANAR entre 2019 y 2024, el 78,2 % fueron mujeres, por temas relacionados con la violencia hacia un menor de edad (60,5 %), especialmente en casos de maltrato físico o psicológico y de agresión sexual, así como por problemas de salud mental (19,7 %), principalmente asociados a problemas de conducta.