Madrid rinde homenaje a Jesús el Pobre y le dedica una plazuela
Ahora, cada vez que alguien transite por la zona podrá «pasar a la Iglesia» o mirar «la placa» y recordar «que estamos bajo la sombra de Jesús el Pobre», destacó el cardenal Cobo en el acto de inauguración, en el que también estuvo el alcalde
Madrid ha rendido homenaje a Jesús el Pobre, al que le ha dedicado una plazuela. Está situada en la calle del Nuncio, en la confluencia de la Costanilla de San Pedro y el Pretil de Santisteban. El acto de presentación, que tuvo lugar este martes 8 de abril, estuvo presidido por el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, y contó además con la presencia del cardenal José Cobo, arzobispo de Madrid, del concejal del cistrito Centro, así como de diversas autoridades civiles, militares, eclesiásticas y miembros de la Hermandad.
Durante su intervención, el cardenal Cobo quiso dar las «gracias por poner el nombre de Jesús el Pobre a esta plazuela para que los vecinos que pasen sepan quién está aquí dentro». Ahora, cada vez que alguien transite por la zona podrá «pasar a la Iglesia» o mirar «la placa» y recordar «que estamos bajo la sombra de Jesús el Pobre, al que pedimos la bendición para todos vosotros y para todos los madrileños. Gracias a los que lo habéis hecho posible».

En este sentido, el arzobispo quiso subrayar que «las raíces de Madrid también tienen el nombre de Jesús», cuya pobreza «es la que nos da la vida y se nos hace cercana porque conecta con las nuestras». Por último, el cardenal reiteró su agradecimiento porque «poner nombre nos hace abrazar las cosas y quererlas más». De esta forma, los madrileños podrán querer más a Jesús el Pobre.
Por su parte, el alcalde de Madrid resaltó la importancia de «reconocer nuestro pasado», dando «cobijo y acogida a manifestaciones religiosas que entroncan con las raíces espirituales y que nos conforman como sociedad».
Desde 1756
La Hermandad de Jesús Nazareno El Pobre y María Santísima del Dulce Nombre en su Soledad, con la aprobación de sus comisarios, solicitó el 25 de octubre de 2023 que se otorgara esta denominación al entorno donde se encuentra su sede canónica, la iglesia de San Pedro el Viejo, que custodia la talla desde 1756. «Este nombramiento es un reconocimiento a la profunda devoción que, a lo largo de los años, el pueblo de Madrid ha manifestado hacia esta imagen tan venerada y milagrosa», explicó el hermano mayor, Carlos Amores, a la archidiócesis de Madrid.
La parroquia de San Pedro el Viejo, en la calle del Nuncio, es una de la más antiguas de la ciudad, que ya aparece citada en el Fuero de 1202, aunque se cree que el templo actual se construyó en el solar, cedido en esa misma calle por el rey Alfonso X El Sabio, para que desde allí se distribuyesen a los vecinos las aguas de la fuente existente. Su antigüedad, unida a su esbelta torre de estilo mudéjar castellano y a sus 30 metros de altura, la hace un monumento muy atractivo para el turismo y es uno de los más visitados de la ciudad.