Los obispos españoles piden vías legales y seguras tras la tragedia del mar Jónico - Alfa y Omega

Los obispos españoles piden vías legales y seguras tras la tragedia del mar Jónico

Reclaman que se esclarezca la muerte de tantas personas que «venían huyendo de guerras, violencias y hambre»

Fran Otero
Kalamata
Supervivientes del naufragio en el puerto de Kalamata (Grecia). Foto: AFP / Angelos Tzortzinis.

La Subcomisión para las Migraciones y la Movilidad Humana de la Conferencia Episcopal Española (CEE) ha reclamado este viernes «políticas y leyes que garanticen vías legales y seguras para los flujos migratorios» y también que se humanicen los protocolos de salvamento marítimo, de modo que se priorice la vida de las personas.

Así lo ha hecho a través de un comunicado días después del trágico naufragio de un barco en el que viajaban cientos de migrantes en el mar Jónico, frente a las costas de Grecia, en el que han fallecido al menos 79 personas y varias decenas continúan desaparecidas.

«Nos sobrecoge una vez más la muerte en el mar de cientos de vidas humanas de niños, mujeres y hombres que venían huyendo de guerras, violencias y hambre y expresamos nuestro dolor y cercanía a todas las víctimas y sus familiares», añade.

Del mismo modo, la CEE ha señalado que esta desgracia «debe ser esclarecida» y enumera los factores que la han provocado y sobre los que se puede trabajar: «La falta de futuro en países de origen, el execrable lucro de las mafias y las políticas y leyes europeas, así como el rechazo al migrante que se va extendiendo por la sociedad».

Y concluye: «A las puertas del Día Mundial de los Refugiados y próximo al primer aniversario de la tragedia en la frontera de Melilla, reiteramos, como pide el Papa Francisco haciéndose eco del Evangelio, nuestro compromiso con la acogida, protección, promoción e integración de refugiados y migrantes».

«Algo no va bien»

Con motivo del Día Mundial del Refugiado, la Mesa por la Hospitalidad de la archidiócesis de Madrid ha hecho público un comunicado en el que lamenta que «una sola víctima ya es motivo suficiente para el dolor y la indignación, pero cuando tantas personas, niños y familias se ven implicadas en estas tragedias, algo no va bien en los países en origen, en los países y en las vías de tránsito y en los países de destino».

La Mesa denuncia asimismo «las prácticas mafiosas de quienes extorsionan y engañan» a los migrantes, al igual que «las infranqueables vallas administrativas y legales» en los países de destino, «que en muchos casos los obligan a estar mucho tiempo en un limbo jurídico hasta que pueden conseguir la cita que no llega para solicitar el asilo».

«Nos jugamos mucho como sociedad y nos enriqueceríamos mucho a todos los niveles si, como nos recuerda el Papa Francisco, “construimos el futuro con los migrantes y refugiados”. Las generaciones futuras nos lo agradecerán si lo hacemos y nos lo demandarán si no lo hacemos», concluye el comunicado.