Los Legionarios de Cristo toman posesión de la primera parroquia que se les encomienda en España
El domingo 10 de octubre el sacerdote Vicente Cortina se convirtió en el nuevo párroco del templo de los Mártires Valencianos, responsabilidad que ha acogido con «actitud de servicio»
El pasado domingo 10 de octubre el legionario de Cristo Vicente Cortina tomó posesión como párroco del templo de los Mártires Valencianos, ubicado en la avenida de Francia de Valencia. «Se trata de un hecho histórico en la vida del Regnum Christi» –movimiento al que pertenecen los Legionarios– porque «es la primera parroquia que se nos encomienda en España», destacan desde esta institución eclesial.
Cortina ha acogido el nombramiento con «actitud de servicio y con el objetivo claro de tratar de llevar a la santidad a las personas que me han sido encomendadas», explica en conversación con Alfa y Omega. «Esto mismo es lo que prediqué en la toma de posesión. Me preguntaba: “¿Cuál tiene que ser el primer punto de la pastoral? Que el sacerdote párroco aspire a la santidad y que ayude a aspirar a la santidad a los demás. Esto es lo que la Iglesia necesita, creo yo, más que nunca», añade.
En términos parecido se expresó durante la celebración el vicario episcopal de Cultura de Valencia, José Luis Sánchez, que presidió la ceremonia y que en cuya homilía le dio varios consejos al nuevo párroco. Sánchez habló de la importancia de la vida de oración, de la formación de los cristianos y de la transcendencia del «servicio de la caridad, porque este es un mandato del Señor». Asimismo, recordó que la Iglesia «no es una asociación filantrópica» sino que «está llamada a vivir la santidad» y pidió, por último, a los fieles que acogieran y apoyaran al párroco porque «el mismo Cristo sigue en la presencia del sacerdote».
Jóvenes y matrimonios
En su nueva responsabilidad, que compaginará de momento con las tareas que tenía encomendadas hasta ahora dentro del Regnum Christi, a Cortina le gustaría «impulsar y ampliar la pastoral juvenil y familiar», asegura. «La parroquia tiene solo 11 años, pero el anterior párroco ha hecho una labor muy buena y se trata de continuar por este camino». En realidad, «no hay nada nuevo bajo el sol. Es hacer lo que ya estamos haciendo en otros entornos del movimiento, pero adaptándolo al contexto de una parroquia».
De esta forma, el nuevo párroco también habla de las peregrinaciones, de la evangelización, de la atención a los mayores, a los enfermos, a los necesitados… «En el fondo, la idea es entregarse al servicio por amor a Cristo y a las personas que Dios te pone delante. Esto es lo fundamental para mí», resume Vicente Cortina.
Pastoral del sordo
La toma de posesión de Cortina coincidió en el tiempo con la Misa de apertura de la nueva parroquia personal para la comunidad de católicos sordos de la diócesis de Valencia, labor que se desarrollará en la parroquia de Santo Tomás Apóstol y San Felipe Neri, que ahora ha pasado a denominarse parroquia de Santa María del Silencio.
El templo ya acogía Misas semanales en lengua de signos, pero «al convertirse en parroquia personal, para de ser una pastoral concreta de una parroquia a ser un instrumento para toda la diócesis», ha destacado el sacerdote Ángel Santamaría, responsables de la Pastoral del Sordo de la diócesis.