Lleno de colores - Alfa y Omega

Me he acercado hoy a Velillas, un pueblecito a orillas del río Carrión. Es un pueblo con muchos colores, y no solo por el paisaje de este tiempo. Esta estación en los pueblos tiene todos los colores de la paleta de un pintor. Si te sientas en la loma, cuando la tarde cae ves algo increíble… Un atardecer aquí es algo digno de vivir.

Pero lo de los colores lo decía porque en los 26 habitantes de este pueblo somos familias de etnia gitana, magrebíes y sudamericanos, además de los que llevan muchas generaciones creciendo y cuidando —o siendo cuidados— por esta tierra.

Sí, hoy suenan las campanas. Hoy tenemos un bautizo, que no es de lo que más abunda por estas tierras. Es un día especial para Ignacio y su familia gitana, y para todo el pueblo. Es un día de fiesta, traje largo y corbata.

Cefe dio el segundo toque a las campanas, avisando de que solo faltaba un cuarto de hora para dar comienzo. Yo colocaba el cirio pascual al lado de la pila bautismal de cuatro siglos de historia, cuando con cierta timidez se acercó Francisco. Venía con su cámara colgada del cuello.

—Hola , ¡buenos días! Que digo yo que, si me permitís, yo os hago las fotos de la celebración. No soy ningún profesional, pero me gusta. Si os parece bien, para que tengáis un recuerdo de este día.

Solo fue un detalle, un pequeño detalle, pero a esta familia y a mí nos llenó de alegría. Y me ha hecho pensar en cómo se puede cuidar y crecer en convivencia con pequeños gestos de vida. Pensando en los demás. No hay que inventárselos, solo estar atentos.

Francisco nos ofreció, con timidez, algo de lo que él es aprendiz: su cámara y sus fotos. Son gestos pequeñitos que construyen un pueblo, que hacen pueblo. Son pequeños gestos generosos que hacen comunidad. Cuando a veces buscamos tanto lo nuestro —y lo llamativo—, detalles pequeños de atención a lo que el vecino necesita hacen crecer algo distinto. Yo sospecho que para crecer necesitamos mirar con sencillez más allá de nosotros mismos. Quizá es importante vernos reflejados en los ojos del otro, del necesitado. Digo yo que en la diversidad y en el pueblo, siempre hay algo que tú puedes aportar… hasta unas fotos.